jueves, 18 de abril de 2013

AUDIO LECTURA PARA EL DIA 05 DE MARZO

Mt 10.26-42,Lv 9-10,Pr 23

LECTURA PARA EL DIA 05 DE MARZO

Mateo
Capítulo 10

10:26 Así que, no los temáis; porque nada hay encubierto, que no haya de ser manifestado; ni oculto, que no haya de saberse.
10:27 Lo que os digo en tinieblas, decidlo en la luz; y lo que oís al oído, proclamadlo desde las azoteas.
10:28 Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.
10:29 ¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre.
10:30 Pues aun vuestros cabellos están todos contados.
10:31 Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos.
10:32 A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos.
10:33 Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.
10:34 No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada.
10:35 Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra;
10:36 y los enemigos del hombre serán los de su casa.
10:37 El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí;
10:38 y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.
10:39 El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.
10:40 El que a vosotros recibe, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió.
10:41 El que recibe a un profeta por cuanto es profeta, recompensa de profeta recibirá; y el que recibe a un justo por cuanto es justo, recompensa de justo recibirá.
10:42 Y cualquiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no perderá su recompensa.


Levítico
Capítulo 09
9:1 En el día octavo, Moisés llamó a Aarón y a sus hijos, y a los ancianos de Israel;
9:2 y dijo a Aarón: Toma de la vacada un becerro para expiación, y un carnero para holocausto, sin defecto, y ofrécelos delante de Jehová.
9:3 Y a los hijos de Israel hablarás diciendo: Tomad un macho cabrío para expiación, y un becerro y un cordero de un año, sin defecto, para holocausto.
9:4 Asimismo un buey y un carnero para sacrificio de paz, que inmoléis delante de Jehová, y una ofrenda amasada con aceite; porque Jehová se aparecerá hoy a vosotros.
9:5 Y llevaron lo que mandó Moisés delante del tabernáculo de reunión, y vino toda la congregación y se puso delante de Jehová.
9:6 Entonces Moisés dijo: Esto es lo que mandó Jehová; hacedlo, y la gloria de Jehová se os aparecerá.
9:7 Y dijo Moisés a Aarón: Acércate al altar, y haz tu expiación y tu holocausto, y haz la reconciliación por ti y por el pueblo; haz también la ofrenda del pueblo, y haz la reconciliación por ellos, como ha mandado Jehová.
9:8 Entonces se acercó Aarón al altar y degolló el becerro de la expiación que era por él.
9:9 Y los hijos de Aarón le trajeron la sangre; y él mojó su dedo en la sangre, y puso de ella sobre los cuernos del altar, y derramó el resto de la sangre al pie del altar.
9:10 E hizo arder sobre el altar la grosura con los riñones y la grosura del hígado de la expiación, como Jehová lo había mandado a Moisés.
9:11 Mas la carne y la piel las quemó al fuego fuera del campamento.
9:12 Degolló asimismo el holocausto, y los hijos de Aarón le presentaron la sangre, la cual roció él alrededor sobre el altar.
9:13 Después le presentaron el holocausto pieza por pieza, y la cabeza; y lo hizo quemar sobre el altar.
9:14 Luego lavó los intestinos y las piernas, y los quemó sobre el holocausto en el altar.
9:15 Ofreció también la ofrenda del pueblo, y tomó el macho cabrío que era para la expiación del pueblo, y lo degolló, y lo ofreció por el pecado como el primero.
9:16 Y ofreció el holocausto, e hizo según el rito.
9:17 Ofreció asimismo la ofrenda, y llenó de ella su mano, y la hizo quemar sobre el altar, además del holocausto de la mañana.
9:18 Degolló también el buey y el carnero en sacrificio de paz, que era del pueblo; y los hijos de Aarón le presentaron la sangre, la cual roció él sobre el altar alrededor;
9:19 y las grosuras del buey y del carnero, la cola, la grosura que cubre los intestinos, los riñones, y la grosura del hígado;
9:20 y pusieron las grosuras sobre los pechos, y él las quemó sobre el altar.
9:21 Pero los pechos, con la espaldilla derecha, los meció Aarón como ofrenda mecida delante de Jehová, como Jehová lo había mandado a Moisés.
9:22 Después alzó Aarón sus manos hacia el pueblo y lo bendijo; y después de hacer la expiación, el holocausto y el sacrificio de paz, descendió.
9:23 Y entraron Moisés y Aarón en el tabernáculo de reunión, y salieron y bendijeron al pueblo; y la gloria de Jehová se apareció a todo el pueblo.
9:24 Y salió fuego de delante de Jehová, y consumió el holocausto con las grosuras sobre el altar; y viéndolo todo el pueblo, alabaron, y se postraron sobre sus rostros.

Levítico
Capítulo 10
10:1 Nadab y Abiú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su incensario, y pusieron en ellos fuego, sobre el cual pusieron incienso, y ofrecieron delante de Jehová fuego extraño, que él nunca les mandó.
10:2 Y salió fuego de delante de Jehová y los quemó, y murieron delante de Jehová.
10:3 Entonces dijo Moisés a Aarón: Esto es lo que habló Jehová, diciendo: En los que a mí se acercan me santificaré, y en presencia de todo el pueblo seré glorificado. Y Aarón calló.
10:4 Y llamó Moisés a Misael y a Elzafán, hijos de Uziel tío de Aarón, y les dijo: Acercaos y sacad a vuestros hermanos de delante del santuario, fuera del campamento.
10:5 Y ellos se acercaron y los sacaron con sus túnicas fuera del campamento, como dijo Moisés.
10:6 Entonces Moisés dijo a Aarón, y a Eleazar e Itamar sus hijos: No descubráis vuestras cabezas, ni rasguéis vuestros vestidos en señal de duelo, para que no muráis, ni se levante la ira sobre toda la congregación; pero vuestros hermanos, toda la casa de Israel, sí lamentarán por el incendio que Jehová ha hecho.
10:7 Ni saldréis de la puerta del tabernáculo de reunión, porque moriréis; por cuanto el aceite de la unción de Jehová está sobre vosotros. Y ellos hicieron conforme al dicho de Moisés.
10:8 Y Jehová habló a Aarón, diciendo:
10:9 Tú, y tus hijos contigo, no beberéis vino ni sidra cuando entréis en el tabernáculo de reunión, para que no muráis; estatuto perpetuo será para vuestras generaciones,
10:10 para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio,
10:11 y para enseñar a los hijos de Israel todos los estatutos que Jehová les ha dicho por medio de Moisés.
10:12 Y Moisés dijo a Aarón, y a Eleazar y a Itamar sus hijos que habían quedado: Tomad la ofrenda que queda de las ofrendas encendidas a Jehová, y comedla sin levadura junto al altar, porque es cosa muy santa.
10:13 La comeréis, pues, en lugar santo; porque esto es para ti y para tus hijos, de las ofrendas encendidas a Jehová, pues que así me ha sido mandado.
10:14 Comeréis asimismo en lugar limpio, tú y tus hijos y tus hijas contigo, el pecho mecido y la espaldilla elevada, porque por derecho son tuyos y de tus hijos, dados de los sacrificios de paz de los hijos de Israel.
10:15 Con las ofrendas de las grosuras que se han de quemar, traerán la espaldilla que se ha de elevar y el pecho que será mecido como ofrenda mecida delante de Jehová; y será por derecho perpetuo tuyo y de tus hijos, como Jehová lo ha mandado.
10:16 Y Moisés preguntó por el macho cabrío de la expiación, y se halló que había sido quemado; y se enojó contra Eleazar e Itamar, los hijos que habían quedado de Aarón, diciendo:
10:17 ¿Por qué no comisteis la expiación en lugar santo? Pues es muy santa, y la dio él a vosotros para llevar la iniquidad de la congregación, para que sean reconciliados delante de Jehová.
10:18 Ved que la sangre no fue llevada dentro del santuario; y vosotros debíais comer la ofrenda en el lugar santo, como yo mandé.
10:19 Y respondió Aarón a Moisés: He aquí hoy han ofrecido su expiación y su holocausto delante de Jehová; pero a mí me han sucedido estas cosas, y si hubiera yo comido hoy del sacrificio de expiación, ¿sería esto grato a Jehová?
10:20 Y cuando Moisés oyó esto, se dio por satisfecho.

Proverbios
Capítulo 23
23:1 Cuando te sientes a comer con algún señor, 
Considera bien lo que está delante de ti, 
23:2 Y pon cuchillo a tu garganta, 
Si tienes gran apetito. 
23:3 No codicies sus manjares delicados, 
Porque es pan engañoso. 
23:4 No te afanes por hacerte rico; 
Sé prudente, y desiste. 
23:5 ¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas? 
Porque se harán alas 
Como alas de águila, y volarán al cielo. 
23:6 No comas pan con el avaro, 
Ni codicies sus manjares; 
23:7 Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. 
Come y bebe, te dirá; 
Mas su corazón no está contigo. 
23:8 Vomitarás la parte que comiste, 
Y perderás tus suaves palabras. 
23:9 No hables a oídos del necio, 
Porque menospreciará la prudencia de tus razones. 
23:10 No traspases el lindero antiguo, 
Ni entres en la heredad de los huérfanos; 
23:11 Porque el defensor de ellos es el Fuerte, 
El cual juzgará la causa de ellos contra ti. 
23:12 Aplica tu corazón a la enseñanza, 
Y tus oídos a las palabras de sabiduría. 
23:13 No rehúses corregir al muchacho; 
Porque si lo castigas con vara, no morirá. 
23:14 Lo castigarás con vara, 
Y librarás su alma del Seol. 
23:15 Hijo mío, si tu corazón fuere sabio, 
También a mí se me alegrará el corazón; 
23:16 Mis entrañas también se alegrarán
Cuando tus labios hablaren cosas rectas. 
23:17 No tenga tu corazón envidia de los pecadores, 
Antes persevera en el temor de Jehová todo el tiempo; 
23:18 Porque ciertamente hay fin, 
Y tu esperanza no será cortada. 
23:19 Oye, hijo mío, y sé sabio, 
Y endereza tu corazón al camino. 
23:20 No estés con los bebedores de vino, 
Ni con los comedores de carne; 
23:21 Porque el bebedor y el comilón empobrecerán, 
Y el sueño hará vestir vestidos rotos. 
23:22 Oye a tu padre, a aquel que te engendró; 
Y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies. 
23:23 Compra la verdad, y no la vendas; 
La sabiduría, la enseñanza y la inteligencia. 
23:24 Mucho se alegrará el padre del justo, 
Y el que engendra sabio se gozará con él. 
23:25 Alégrense tu padre y tu madre, 
Y gócese la que te dio a luz. 
23:26 Dame, hijo mío, tu corazón, 
Y miren tus ojos por mis caminos. 
23:27 Porque abismo profundo es la ramera, 
Y pozo angosto la extraña. 
23:28 También ella, como robador, acecha, 
Y multiplica entre los hombres los prevaricadores. 
23:29 ¿Para quién será el ay? ¿Para quién el dolor? ¿Para quién las rencillas? 
¿Para quién las quejas? ¿Para quién las heridas en balde? 
¿Para quién lo amoratado de los ojos? 
23:30 Para los que se detienen mucho en el vino, 
Para los que van buscando la mistura. 
23:31 No mires al vino cuando rojea, 
Cuando resplandece su color en la copa. 
Se entra suavemente; 
23:32 Mas al fin como serpiente morderá, 
Y como áspid dará dolor. 
23:33 Tus ojos mirarán cosas extrañas, 
Y tu corazón hablará perversidades. 
23:34 Serás como el que yace en medio del mar, 
O como el que está en la punta de un mastelero. 
23:35 Y dirás: Me hirieron, mas no me dolió; 
Me azotaron, mas no lo sentí; 
Cuando despertare, aún lo volveré a buscar.



AUDIO LECTURA PARA EL DIA 04 DE MARZO

miércoles, 17 de abril de 2013

Mt 10.1-25,Lv 7-8,Pr 22

LECTURA PARA EL DIA 04 DE MARZO
Mateo
Capítulo 10
10:1 Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia.
10:2 Los nombres de los doce apóstoles son estos: primero Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano; Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano;
10:3 Felipe, Bartolomé, Tomás, Mateo el publicano, Jacobo hijo de Alfeo, Lebeo, por sobrenombre Tadeo,
10:4 Simón el cananista, y Judas Iscariote, el que también le entregó.
10:5 A estos doce envió Jesús, y les dio instrucciones, diciendo: Por camino de gentiles no vayáis, y en ciudad de samaritanos no entréis,
10:6 sino id antes a las ovejas perdidas de la casa de Israel.
10:7 Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado.
10:8 Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.
10:9 No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos;
10:10 ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento.
10:11 Mas en cualquier ciudad o aldea donde entréis, informaos quién en ella sea digno, y posad allí hasta que salgáis.
10:12 Y al entrar en la casa, saludadla.
10:13 Y si la casa fuere digna, vuestra paz vendrá sobre ella; mas si no fuere digna, vuestra paz se volverá a vosotros.
10:14 Y si alguno no os recibiere, ni oyere vuestras palabras, salid de aquella casa o ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies.
10:15 De cierto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma y de Gomorra, que para aquella ciudad.
10:16 He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas.
10:17 Y guardaos de los hombres, porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán;
10:18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.
10:19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.
10:20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.
10:21 El hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres, y los harán morir.
10:22 Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.
10:23 Cuando os persigan en esta ciudad, huid a la otra; porque de cierto os digo, que no acabaréis de recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo de Hombre.
10:24 El discípulo no es más que su maestro, ni el siervo más que su señor.
10:25 Bástale al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Beelzeb, ¿cuánto más a los de su casa?


Levítico
Capítulo 07
7:1 Asimismo esta es la ley del sacrificio por la culpa; es cosa muy santa.
7:2 En el lugar donde degüellan el holocausto, degollarán la víctima por la culpa; y rociará su sangre alrededor sobre el altar.
7:3 Y de ella ofrecerá toda su grosura, la cola, y la grosura que cubre los intestinos,
7:4 los dos riñones, la grosura que está sobre ellos, y la que está sobre los ijares; y con los riñones quitará la grosura de sobre el hígado.
7:5 Y el sacerdote lo hará arder sobre el altar, ofrenda encendida a Jehová; es expiación de la culpa.
7:6 Todo varón de entre los sacerdotes la comerá; será comida en lugar santo; es cosa muy santa.
7:7 Como el sacrificio por el pecado, así es el sacrificio por la culpa; una misma ley tendrán; será del sacerdote que hiciere la expiación con ella.
7:8 Y el sacerdote que ofreciere holocausto de alguno, la piel del holocausto que ofreciere será para él.
7:9 Asimismo toda ofrenda que se cociere en horno, y todo lo que fuere preparado en sartén o en cazuela, será del sacerdote que lo ofreciere.
7:10 Y toda ofrenda amasada con aceite, o seca, será de todos los hijos de Aarón, tanto de uno como de otro.
7:11 Y esta es la ley del sacrificio de paz que se ofrecerá a Jehová:
7:12 Si se ofreciere en acción de gracias, ofrecerá por sacrificio de acción de gracias tortas sin levadura amasadas con aceite, y hojaldres sin levadura untadas con aceite, y flor de harina frita en tortas amasadas con aceite.
7:13 Con tortas de pan leudo presentará su ofrenda en el sacrificio de acciones de gracias de paz.
7:14 Y de toda la ofrenda presentará una parte por ofrenda elevada a Jehová, y será del sacerdote que rociare la sangre de los sacrificios de paz.
7:15 Y la carne del sacrificio de paz en acción de gracias se comerá en el día que fuere ofrecida; no dejarán de ella nada para otro día.
7:16 Mas si el sacrificio de su ofrenda fuere voto, o voluntario, será comido en el día que ofreciere su sacrificio, y lo que de él quedare, lo comerán al día siguiente;
7:17 y lo que quedare de la carne del sacrificio hasta el tercer día, será quemado en el fuego.
7:18 Si se comiere de la carne del sacrificio de paz al tercer día, el que lo ofreciere no será acepto, ni le será contado; abominación será, y la persona que de él comiere llevará su pecado.
7:19 Y la carne que tocare alguna cosa inmunda, no se comerá; al fuego será quemada. Toda persona limpia podrá comer la carne;
7:20 pero la persona que comiere la carne del sacrificio de paz, el cual es de Jehová, estando inmunda, aquella persona será cortada de entre su pueblo.
7:21 Además, la persona que tocare alguna cosa inmunda, inmundicia de hombre, o animal inmundo, o cualquier abominación inmunda, y comiere la carne del sacrificio de paz, el cual es de Jehová, aquella persona será cortada de entre su pueblo.
7:22 Habló más Jehová a Moisés, diciendo:
7:23 Habla a los hijos de Israel, diciendo: Ninguna grosura de buey ni de cordero ni de cabra comeréis.
7:24 La grosura de animal muerto, y la grosura del que fue despedazado por fieras, se dispondrá para cualquier otro uso, mas no la comeréis.
7:25 Porque cualquiera que comiere grosura de animal, del cual se ofrece a Jehová ofrenda encendida, la persona que lo comiere será cortada de entre su pueblo.
7:26 Además, ninguna sangre comeréis en ningún lugar en donde habitéis, ni de aves ni de bestias.
7:27 Cualquiera persona que comiere de alguna sangre, la tal persona será cortada de entre su pueblo.
7:28 Habló más Jehová a Moisés, diciendo:
7:29 Habla a los hijos de Israel y diles: El que ofreciere sacrificio de paz a Jehová, traerá su ofrenda del sacrificio de paz ante Jehová.
7:30 Sus manos traerán las ofrendas que se han de quemar ante Jehová; traerá la grosura con el pecho; el pecho para que sea mecido como sacrificio mecido delante de Jehová.
7:31 Y la grosura la hará arder el sacerdote en el altar, mas el pecho será de Aarón y de sus hijos.
7:32 Y daréis al sacerdote para ser elevada en ofrenda, la espaldilla derecha de vuestros sacrificios de paz.
7:33 El que de los hijos de Aarón ofreciere la sangre de los sacrificios de paz, y la grosura, recibirá la espaldilla derecha como porción suya.
7:34 Porque he tomado de los sacrificios de paz de los hijos de Israel el pecho que se mece y la espaldilla elevada en ofrenda, y lo he dado a Aarón el sacerdote y a sus hijos, como estatuto perpetuo para los hijos de Israel.
7:35 Esta es la porción de Aarón y la porción de sus hijos, de las ofrendas encendidas a Jehová, desde el día que él los consagró para ser sacerdotes de Jehová,
7:36 la cual mandó Jehová que les diesen, desde el día que él los ungió de entre los hijos de Israel, como estatuto perpetuo en sus generaciones.
7:37 Esta es la ley del holocausto, de la ofrenda, del sacrificio por el pecado, del sacrificio por la culpa, de las consagraciones y del sacrificio de paz,
7:38 la cual mandó Jehová a Moisés en el monte de Sinaí, el día que mandó a los hijos de Israel que ofreciesen sus ofrendas a Jehová, en el desierto de Sinaí.


Levítico
Capítulo 08
8:1 Habló Jehová a Moisés, diciendo:
8:2 Toma a Aarón y a sus hijos con él, y las vestiduras, el aceite de la unción, el becerro de la expiación, los dos carneros, y el canastillo de los panes sin levadura;
8:3 y reúne toda la congregación a la puerta del tabernáculo de reunión.
8:4 Hizo, pues, Moisés como Jehová le mandó, y se reunió la congregación a la puerta del tabernáculo de reunión.
8:5 Y dijo Moisés a la congregación: Esto es lo que Jehová ha mandado hacer.
8:6 Entonces Moisés hizo acercarse a Aarón y a sus hijos, y los lavó con agua.
8:7 Y puso sobre él la túnica, y le ciñó con el cinto; le vistió después el manto, y puso sobre él el efod, y lo ciñó con el cinto del efod, y lo ajustó con él.
8:8 Luego le puso encima el pectoral, y puso dentro del mismo los Urim y Tumim.
8:9 Después puso la mitra sobre su cabeza, y sobre la mitra, en frente, puso la lámina de oro, la diadema santa, como Jehová había mandado a Moisés.
8:10 Y tomó Moisés el aceite de la unción y ungió el tabernáculo y todas las cosas que estaban en él, y las santificó.
8:11 Y roció de él sobre el altar siete veces, y ungió el altar y todos sus utensilios, y la fuente y su base, para santificarlos.
8:12 Y derramó del aceite de la unción sobre la cabeza de Aarón, y lo ungió para santificarlo.
8:13 Después Moisés hizo acercarse los hijos de Aarón, y les vistió las túnicas, les ciñó con cintos, y les ajustó las tiaras, como Jehová lo había mandado a Moisés.
8:14 Luego hizo traer el becerro de la expiación, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del becerro de la expiación,
8:15 y lo degolló; y Moisés tomó la sangre, y puso con su dedo sobre los cuernos del altar alrededor, y purificó el altar; y echó la demás sangre al pie del altar, y lo santificó para reconciliar sobre él.
8:16 Después tomó toda la grosura que estaba sobre los intestinos, y la grosura del hígado, y los dos riñones, y la grosura de ellos, y lo hizo arder Moisés sobre el altar.
8:17 Mas el becerro, su piel, su carne y su estiércol, lo quemó al fuego fuera del campamento, como Jehová lo había mandado a Moisés.
8:18 Después hizo que trajeran el carnero del holocausto, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero;
8:19 y lo degolló; y roció Moisés la sangre sobre el altar alrededor,
8:20 y cortó el carnero en trozos; y Moisés hizo arder la cabeza, y los trozos, y la grosura.
8:21 Lavó luego con agua los intestinos y las piernas, y quemó Moisés todo el carnero sobre el altar; holocausto de olor grato, ofrenda encendida para Jehová, como Jehová lo había mandado a Moisés.
8:22 Después hizo que trajeran el otro carnero, el carnero de las consagraciones, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero.
8:23 Y lo degolló; y tomó Moisés de la sangre, y la puso sobre el lóbulo de la oreja derecha de Aarón, sobre el dedo pulgar de su mano derecha, y sobre el dedo pulgar de su pie derecho.
8:24 Hizo acercarse luego los hijos de Aarón, y puso Moisés de la sangre sobre el lóbulo de sus orejas derechas, sobre los pulgares de sus manos derechas, y sobre los pulgares de sus pies derechos; y roció Moisés la sangre sobre el altar alrededor.
8:25 Después tomó la grosura, la cola, toda la grosura que estaba sobre los intestinos, la grosura del hígado, los dos riñones y la grosura de ellos, y la espaldilla derecha.
8:26 Y del canastillo de los panes sin levadura, que estaba delante de Jehová, tomó una torta sin levadura, y una torta de pan de aceite, y una hojaldre, y lo puso con la grosura y con la espaldilla derecha.
8:27 Y lo puso todo en las manos de Aarón, y en las manos de sus hijos, e hizo mecerlo como ofrenda mecida delante de Jehová.
8:28 Después tomó aquellas cosas Moisés de las manos de ellos, y las hizo arder en el altar sobre el holocausto; eran las consagraciones en olor grato, ofrenda encendida a Jehová.
8:29 Y tomó Moisés el pecho, y lo meció, ofrenda mecida delante de Jehová; del carnero de las consagraciones aquella fue la parte de Moisés, como Jehová lo había mandado a Moisés.
8:30 Luego tomó Moisés del aceite de la unción, y de la sangre que estaba sobre el altar, y roció sobre Aarón, y sobre sus vestiduras, sobre sus hijos, y sobre las vestiduras de sus hijos con él; y santificó a Aarón y sus vestiduras, y a sus hijos y las vestiduras de sus hijos con él.
8:31 Y dijo Moisés a Aarón y a sus hijos: Hervid la carne a la puerta del tabernáculo de reunión; y comedla allí con el pan que está en el canastillo de las consagraciones, según yo he mandado, diciendo: Aarón y sus hijos la comerán.
8:32 Y lo que sobre de la carne y del pan, lo quemaréis al fuego.
8:33 De la puerta del tabernáculo de reunión no saldréis en siete días, hasta el día que se cumplan los días de vuestras consagraciones; porque por siete días seréis consagrados.
8:34 De la manera que hoy se ha hecho, mandó hacer Jehová para expiaros.
8:35 A la puerta, pues, del tabernáculo de reunión estaréis día y noche por siete días, y guardaréis la ordenanza delante de Jehová, para que no muráis; porque así me ha sido mandado.
8:36 Y Aarón y sus hijos hicieron todas las cosas que mandó Jehová por medio de Moisés.


Proverbios
Capítulo 22
22:1 De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, 
Y la buena fama más que la plata y el oro. 
22:2 El rico y el pobre se encuentran; 
A ambos los hizo Jehová. 
22:3 El avisado ve el mal y se esconde; 
Mas los simples pasan y reciben el daño. 
22:4 Riquezas, honra y vida 
Son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová. 
22:5 Espinos y lazos hay en el camino del perverso; 
El que guarda su alma se alejará de ellos. 
22:6 Instruye al niño en su camino, 
Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él. 
22:7 El rico se enseñorea de los pobres, 
Y el que toma prestado es siervo del que presta. 
22:8 El que sembrare iniquidad, iniquidad segará, 
Y la vara de su insolencia se quebrará. 
22:9 El ojo misericordioso será bendito, 
Porque dio de su pan al indigente. 
22:10 Echa fuera al escarnecedor, y saldrá la contienda, 
Y cesará el pleito y la afrenta. 
22:11 El que ama la limpieza de corazón, 
Por la gracia de sus labios tendrá la amistad del rey. 
22:12 Los ojos de Jehová velan por la ciencia; 
Mas él trastorna las cosas de los prevaricadores. 
22:13 Dice el perezoso: El león está fuera; 
Seré muerto en la calle. 
22:14 Fosa profunda es la boca de la mujer extraña; 
Aquel contra el cual Jehová estuviere airado caerá en ella. 
22:15 La necedad está ligada en el corazón del muchacho; 
Mas la vara de la corrección la alejará de él. 
22:16 El que oprime al pobre para aumentar sus ganancias,
O que da al rico, ciertamente se empobrecerá. 


Preceptos y amonestaciones

22:17 Inclina tu oído y oye las palabras de los sabios, 
Y aplica tu corazón a mi sabiduría; 
22:18 Porque es cosa deliciosa, si las guardares dentro de ti; 
Si juntamente se afirmaren sobre tus labios. 
22:19 Para que tu confianza sea en Jehová, 
Te las he hecho saber hoy a ti también. 
22:20 ¿No te he escrito tres veces 
En consejos y en ciencia, 
22:21 Para hacerte saber la certidumbre de las palabras de verdad, 
A fin de que vuelvas a llevar palabras de verdad a los que te enviaron? 
22:22 No robes al pobre, porque es pobre, 
Ni quebrantes en la puerta al afligido; 
22:23 Porque Jehová juzgará la causa de ellos, 
Y despojará el alma de aquellos que los despojaren. 
22:24 No te entremetas con el iracundo, 
Ni te acompañes con el hombre de enojos, 
22:25 No sea que aprendas sus maneras, 
Y tomes lazo para tu alma. 
22:26 No seas de aquellos que se comprometen, 
Ni de los que salen por fiadores de deudas. 
22:27 Si no tuvieres para pagar, 
¿Por qué han de quitar tu cama de debajo de ti? 
22:28 No traspases los linderos antiguos 
Que pusieron tus padres. 
22:29 ¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará; 
No estará delante de los de baja condición.


AUDIO LECTURA PARA EL DIA 03 DE MARZO

Mt 9.18-38,Lv 5-6,Pr 21

LECTURA PARA EL DIA 03 DE MARZO
Mateo
Capítulo 09

9:18 Mientras él les decía estas cosas, vino un hombre principal y se postró ante él, diciendo: Mi hija acaba de morir; mas ven y pon tu mano sobre ella, y vivirá.
9:19 Y se levantó Jesús, y le siguió con sus discípulos.
9:20 Y he aquí una mujer enferma de flujo de sangre desde hacía doce años, se le acercó por detrás y tocó el borde de su manto;
9:21 porque decía dentro de sí: Si tocare solamente su manto, seré salva.
9:22 Pero Jesús, volviéndose y mirándola, dijo: Ten ánimo, hija; tu fe te ha salvado. Y la mujer fue salva desde aquella hora.
9:23 Al entrar Jesús en la casa del principal, viendo a los que tocaban flautas, y la gente que hacía alboroto,
9:24 les dijo: Apartaos, porque la niña no está muerta, sino duerme. Y se burlaban de él.
9:25 Pero cuando la gente había sido echada fuera, entró, y tomó de la mano a la niña, y ella se levantó.
9:26 Y se difundió la fama de esto por toda aquella tierra.
9:27 Pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo: ¡Ten misericordia de nosotros, Hijo de David!
9:28 Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor.
9:29 Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho.
9:30 Y los ojos de ellos fueron abiertos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa.
9:31 Pero salidos ellos, divulgaron la fama de él por toda aquella tierra.
9:32 Mientras salían ellos, he aquí, le trajeron un mudo, endemoniado.
9:33 Y echado fuera el demonio, el mudo habló; y la gente se maravillaba, y decía: Nunca se ha visto cosa semejante en Israel.
9:34 Pero los fariseos decían: Por el príncipe de los demonios echa fuera los demonios.
9:35 Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.
9:36 Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.
9:37 Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos.
9:38 Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.



Levítico
Capítulo 05
5:1 Si alguno pecare por haber sido llamado a testificar, y fuere testigo que vio, o supo, y no lo denunciare, él llevará su pecado.
5:2 Asimismo la persona que hubiere tocado cualquiera cosa inmunda, sea cadáver de bestia inmunda, o cadáver de animal inmundo, o cadáver de reptil inmundo, bien que no lo supiere, será inmunda y habrá delinquido.
5:3 O si tocare inmundicia de hombre, cualquiera inmundicia suya con que fuere inmundo, y no lo echare de ver, si después llegare a saberlo, será culpable.
5:4 O si alguno jurare a la ligera con sus labios hacer mal o hacer bien, en cualquiera cosa que el hombre profiere con juramento, y él no lo entendiere; si después lo entiende, será culpable por cualquiera de estas cosas.
5:5 Cuando pecare en alguna de estas cosas, confesará aquello en que pecó,
5:6 y para su expiación traerá a Jehová por su pecado que cometió, una hembra de los rebaños, una cordera o una cabra como ofrenda de expiación; y el sacerdote le hará expiación por su pecado.
5:7 Y si no tuviere lo suficiente para un cordero, traerá a Jehová en expiación por su pecado que cometió, dos tórtolas o dos palominos, el uno para expiación, y el otro para holocausto.
5:8 Y los traerá al sacerdote, el cual ofrecerá primero el que es para expiación; y le arrancará de su cuello la cabeza, mas no la separará por completo.
5:9 Y rociará de la sangre de la expiación sobre la pared del altar; y lo que sobrare de la sangre lo exprimirá al pie del altar; es expiación.
5:10 Y del otro hará holocausto conforme al rito; así el sacerdote hará expiación por el pecado de aquel que lo cometió, y será perdonado.
5:11 Mas si no tuviere lo suficiente para dos tórtolas, o dos palominos, el que pecó traerá como ofrenda la décima parte de un efa de flor de harina para expiación. No pondrá sobre ella aceite, ni sobre ella pondrá incienso, porque es expiación.
5:12 La traerá, pues, al sacerdote, y el sacerdote tomará de ella su puño lleno, para memoria de él, y la hará arder en el altar sobre las ofrendas encendidas a Jehová; es expiación.
5:13 Y hará el sacerdote expiación por él en cuanto al pecado que cometió en alguna de estas cosas, y será perdonado; y el sobrante será del sacerdote, como la ofrenda de vianda.
5:14 Habló más Jehová a Moisés, diciendo:
5:15 Cuando alguna persona cometiere falta, y pecare por yerro en las cosas santas de Jehová, traerá por su culpa a Jehová un carnero sin defecto de los rebaños, conforme a tu estimación en siclos de plata del siclo del santuario, en ofrenda por el pecado.
5:16 Y pagará lo que hubiere defraudado de las cosas santas, y añadirá a ello la quinta parte, y lo dará al sacerdote; y el sacerdote hará expiación por él con el carnero del sacrificio por el pecado, y será perdonado.
5:17 Finalmente, si una persona pecare, o hiciere alguna de todas aquellas cosas que por mandamiento de Jehová no se han de hacer, aun sin hacerlo a sabiendas, es culpable, y llevará su pecado.
5:18 Traerá, pues, al sacerdote para expiación, según tú lo estimes, un carnero sin defecto de los rebaños; y el sacerdote le hará expiación por el yerro que cometió por ignorancia, y será perdonado.
5:19 Es infracción, y ciertamente delinquió contra Jehová.


Levítico
Capítulo 06
6:1 Habló Jehová a Moisés, diciendo:
6:2 Cuando una persona pecare e hiciere prevaricación contra Jehová, y negare a su prójimo lo encomendado o dejado en su mano, o bien robare o calumniare a su prójimo,
6:3 o habiendo hallado lo perdido después lo negare, y jurare en falso; en alguna de todas aquellas cosas en que suele pecar el hombre,
6:4 entonces, habiendo pecado y ofendido, restituirá aquello que robó, o el daño de la calumnia, o el depósito que se le encomendó, o lo perdido que halló,
6:5 o todo aquello sobre que hubiere jurado falsamente; lo restituirá por entero a aquel a quien pertenece, y añadirá a ello la quinta parte, en el día de su expiación.
6:6 Y para expiación de su culpa traerá a Jehová un carnero sin defecto de los rebaños, conforme a tu estimación, y lo dará al sacerdote para la expiación.
6:7 Y el sacerdote hará expiación por él delante de Jehová, y obtendrá perdón de cualquiera de todas las cosas en que suele ofender.
6:8 Habló aún Jehová a Moisés, diciendo:
6:9 Manda a Aarón y a sus hijos, y diles: Esta es la ley del holocausto: el holocausto estará sobre el fuego encendido sobre el altar toda la noche, hasta la mañana; el fuego del altar arderá en él.
6:10 Y el sacerdote se pondrá su vestidura de lino, y vestirá calzoncillos de lino sobre su cuerpo; y cuando el fuego hubiere consumido el holocausto, apartará él las cenizas de sobre el altar, y las pondrá junto al altar.
6:11 Después se quitará sus vestiduras y se pondrá otras ropas, y sacará las cenizas fuera del campamento a un lugar limpio.
6:12 Y el fuego encendido sobre el altar no se apagará, sino que el sacerdote pondrá en él leña cada mañana, y acomodará el holocausto sobre él, y quemará sobre él las grosuras de los sacrificios de paz.
6:13 El fuego arderá continuamente en el altar; no se apagará.
6:14 Esta es la ley de la ofrenda: La ofrecerán los hijos de Aarón delante de Jehová ante el altar.
6:15 Y tomará de ella un puñado de la flor de harina de la ofrenda, y de su aceite, y todo el incienso que está sobre la ofrenda, y lo hará arder sobre el altar por memorial en olor grato a Jehová.
6:16 Y el sobrante de ella lo comerán Aarón y sus hijos; sin levadura se comerá en lugar santo; en el atrio del tabernáculo de reunión lo comerán.
6:17 No se cocerá con levadura; la he dado a ellos por su porción de mis ofrendas encendidas; es cosa santísima, como el sacrificio por el pecado, y como el sacrificio por la culpa.
6:18 Todos los varones de los hijos de Aarón comerán de ella. Estatuto perpetuo será para vuestras generaciones tocante a las ofrendas encendidas para Jehová; toda cosa que tocare en ellas será santificada.
6:19 Habló también Jehová a Moisés, diciendo:
6:20 Esta es la ofrenda de Aarón y de sus hijos, que ofrecerán a Jehová el día que fueren ungidos: la décima parte de un efa de flor de harina, ofrenda perpetua, la mitad a la mañana y la mitad a la tarde.
6:21 En sartén se preparará con aceite; frita la traerás, y los pedazos cocidos de la ofrenda ofrecerás en olor grato a Jehová.
6:22 Y el sacerdote que en lugar de Aarón fuere ungido de entre sus hijos, hará igual ofrenda. Es estatuto perpetuo de Jehová; toda ella será quemada.
6:23 Toda ofrenda de sacerdote será enteramente quemada; no se comerá.
6:24 Y habló Jehová a Moisés, diciendo:
6:25 Habla a Aarón y a sus hijos, y diles: Esta es la ley del sacrificio expiatorio: en el lugar donde se degüella el holocausto, será degollada la ofrenda por el pecado delante de Jehová; es cosa santísima.
6:26 El sacerdote que la ofreciere por el pecado, la comerá; en lugar santo será comida, en el atrio del tabernáculo de reunión.
6:27 Todo lo que tocare su carne, será santificado; y si salpicare su sangre sobre el vestido, lavarás aquello sobre que cayere, en lugar santo.
6:28 Y la vasija de barro en que fuere cocida, será quebrada; y si fuere cocida en vasija de bronce, será fregada y lavada con agua.
6:29 Todo varón de entre los sacerdotes la comerá; es cosa santísima.
6:30 Mas no se comerá ninguna ofrenda de cuya sangre se metiere en el tabernáculo de reunión para hacer expiación en el santuario; al fuego será quemada.


Proverbios
Capítulo 21
21:1 Como los repartimientos de las aguas, 
Así está el corazón del rey en la mano de Jehová; 
A todo lo que quiere lo inclina. 
21:2 Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; 
Pero Jehová pesa los corazones. 
21:3 Hacer justicia y juicio es a Jehová 
Más agradable que sacrificio. 
21:4 Altivez de ojos, y orgullo de corazón, 
Y pensamiento de impíos, son pecado. 
21:5 Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la abundancia; 
Mas todo el que se apresura alocadamente, de cierto va a la pobreza. 
21:6 Amontonar tesoros con lengua mentirosa 
Es aliento fugaz de aquellos que buscan la muerte. 
21:7 La rapiña de los impíos los destruirá,
Por cuanto no quisieron hacer juicio. 
21:8 El camino del hombre perverso es torcido y extraño; 
Mas los hechos del limpio son rectos. 
21:9 Mejor es vivir en un rincón del terrado 
Que con mujer rencillosa en casa espaciosa. 
21:10 El alma del impío desea el mal; 
Su prójimo no halla favor en sus ojos. 
21:11 Cuando el escarnecedor es castigado, el simple se hace sabio; 
Y cuando se le amonesta al sabio, aprende ciencia. 
21:12 Considera el justo la casa del impío, 
Cómo los impíos son trastornados por el mal. 
21:13 El que cierra su oído al clamor del pobre, 
También él clamará, y no será oído. 
21:14  La dádiva en secreto calma el furor, 
Y el don en el seno, la fuerte ira. 
21:15 Alegría es para el justo el hacer juicio; 
Mas destrucción a los que hacen iniquidad. 
21:16 El hombre que se aparta del camino de la sabiduría 
Vendrá a parar en la compañía de los muertos. 
21:17 Hombre necesitado será el que ama el deleite, 
Y el que ama el vino y los ungüentos no se enriquecerá.
21:18 Rescate del justo es el impío, 
Y por los rectos, el prevaricador. 
21:19 Mejor es morar en tierra desierta 
Que con la mujer rencillosa e iracunda. 
21:20 Tesoro precioso y aceite hay en la casa del sabio; 
Mas el hombre insensato todo lo disipa. 
21:21 El que sigue la justicia y la misericordia 
Hallará la vida, la justicia y la honra. 
21:22 Tomó el sabio la ciudad de los fuertes, 
Y derribó la fuerza en que ella confiaba. 
21:23 El que guarda su boca y su lengua, 
Su alma guarda de angustias. 
21:24 Escarnecedor es el nombre del soberbio y presuntuoso 
Que obra en la insolencia de su presunción.
21:25 El deseo del perezoso le mata, 
Porque sus manos no quieren trabajar. 
21:26 Hay quien todo el día codicia; 
Pero el justo da, y no detiene su mano. 
21:27 El sacrificio de los impíos es abominación; 
¡Cuánto más ofreciéndolo con maldad! 
21:28 El testigo mentiroso perecerá; 
Mas el hombre que oye, permanecerá en su dicho. 
21:29 El hombre impío endurece su rostro; 
Mas el recto ordena sus caminos. 
21:30 No hay sabiduría, ni inteligencia, 
Ni consejo, contra Jehová. 
21:31 El caballo se alista para el día de la batalla; 
Mas Jehová es el que da la victoria.

AUDIO LECTURA PARA EL DIA 02 DE MARZO

lunes, 15 de abril de 2013

Mt 9.1-17,Lv 3-4,Pr 20

LECTURA PARA EL DIA 02 DE MARZO
Mateo
Capítulo 09
9:1 Entonces, entrando Jesús en la barca, pasó al otro lado y vino a su ciudad.
9:2 Y sucedió que le trajeron un paralítico, tendido sobre una cama; y al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Ten ánimo, hijo; tus pecados te son perdonados.
9:3 Entonces algunos de los escribas decían dentro de sí: Este blasfema.
9:4 Y conociendo Jesús los pensamientos de ellos, dijo: ¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones?
9:5 Porque, ¿qué es más fácil, decir: Los pecados te son perdonados, o decir: Levántate y anda?
9:6 Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dice entonces al paralítico): Levántate, toma tu cama, y vete a tu casa.
9:7 Entonces él se levantó y se fue a su casa.
9:8 Y la gente, al verlo, se maravilló y glorificó a Dios, que había dado tal potestad a los hombres.
9:9 Pasando Jesús de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme. Y se levantó y le siguió.
9:10 Y aconteció que estando él sentado a la mesa en la casa, he aquí que muchos publicanos y pecadores, que habían venido, se sentaron juntamente a la mesa con Jesús y sus discípulos.
9:11 Cuando vieron esto los fariseos, dijeron a los discípulos: ¿Porqué come vuestro Maestro con los publicanos y pecadores?
9:12 Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.
9:13 Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento.
9:14 Entonces vinieron a él los discípulos de Juan, diciendo: ¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos muchas veces, y tus discípulos no ayunan?
9:15 Jesús les dijo: ¿Acaso pueden los que están de bodas tener luto entre tanto que el esposo está con ellos? Pero vendrán días cuando el esposo les será quitado, y entonces ayunarán.
9:16 Nadie pone remiendo de paño nuevo en vestido viejo; porque tal remiendo tira del vestido, y se hace peor la rotura.
9:17 Ni echan vino nuevo en odres viejos; de otra manera los odres se rompen, y el vino se derrama, y los odres se pierden; pero echan el vino nuevo en odres nuevos, y lo uno y lo otro se conservan juntamente.

Levítico
Capítulo 03
3:1 Si su ofrenda fuere sacrificio de paz, si hubiere de ofrecerla de ganado vacuno, sea macho o hembra, sin defecto la ofrecerá delante de Jehová.
3:2 Pondrá su mano sobre la cabeza de su ofrenda, y la degollará a la puerta del tabernáculo de reunión; y los sacerdotes hijos de Aarón rociarán su sangre sobre el altar alrededor.
3:3 Luego ofrecerá del sacrificio de paz, como ofrenda encendida a Jehová, la grosura que cubre los intestinos, y toda la grosura que está sobre las entrañas,
3:4 y los dos riñones y la grosura que está sobre ellos, y sobre los ijares; y con los riñones quitará la grosura de los intestinos que está sobre el hígado.
3:5 Y los hijos de Aarón harán arder esto en el altar, sobre el holocausto que estará sobre la leña que habrá encima del fuego; es ofrenda de olor grato para Jehová.
3:6 Mas si de ovejas fuere su ofrenda para sacrificio de paz a Jehová, sea macho o hembra, la ofrecerá sin defecto.
3:7 Si ofreciere cordero por su ofrenda, lo ofrecerá delante de Jehová.
3:8 Pondrá su mano sobre la cabeza de su ofrenda, y después la degollará delante del tabernáculo de reunión; y los hijos de Aarón rociarán su sangre sobre el altar alrededor.
3:9 Y del sacrificio de paz ofrecerá por ofrenda encendida a Jehová la grosura, la cola entera, la cual quitará a raíz del espinazo, la grosura que cubre todos los intestinos, y toda la que está sobre las entrañas.
3:10 Asimismo los dos riñones y la grosura que está sobre ellos, y la que está sobre los ijares; y con los riñones quitará la grosura de sobre el hígado.
3:11 Y el sacerdote hará arder esto sobre el altar; vianda es de ofrenda encendida para Jehová.
3:12 Si fuere cabra su ofrenda, la ofrecerá delante de Jehová.
3:13 Pondrá su mano sobre la cabeza de ella, y la degollará delante del tabernáculo de reunión; y los hijos de Aarón rociarán su sangre sobre el altar alrededor.
3:14 Después ofrecerá de ella su ofrenda encendida a Jehová; la grosura que cubre los intestinos, y toda la grosura que está sobre las entrañas,
3:15 los dos riñones, la grosura que está sobre ellos, y la que está sobre los ijares; y con los riñones quitará la grosura de sobre el hígado.
3:16 Y el sacerdote hará arder esto sobre el altar; vianda es de ofrenda que se quema en olor grato a Jehová; toda la grosura es de Jehová.
3:17 Estatuto perpetuo será por vuestras edades, dondequiera que habitéis, que ninguna grosura ni ninguna sangre comeréis.


Levítico
Capítulo 04
4:1 Habló Jehová a Moisés, diciendo:
4:2 Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando alguna persona pecare por yerro en alguno de los mandamientos de Jehová sobre cosas que no se han de hacer, e hiciere alguna de ellas;
4:3 si el sacerdote ungido pecare según el pecado del pueblo, ofrecerá a Jehová, por su pecado que habrá cometido, un becerro sin defecto para expiación.
4:4 Traerá el becerro a la puerta del tabernáculo de reunión delante de Jehová, y pondrá su mano sobre la cabeza del becerro, y lo degollará delante de Jehová.
4:5 Y el sacerdote ungido tomará de la sangre del becerro, y la traerá al tabernáculo de reunión;
4:6 y mojará el sacerdote su dedo en la sangre, y rociará de aquella sangre siete veces delante de Jehová, hacia el velo del santuario.
4:7 Y el sacerdote pondrá de esa sangre sobre los cuernos del altar del incienso aromático, que está en el tabernáculo de reunión delante de Jehová; y echará el resto de la sangre del becerro al pie del altar del holocausto, que está a la puerta del tabernáculo de reunión.
4:8 Y tomará del becerro para la expiación toda su grosura, la que cubre los intestinos, y la que está sobre las entrañas,
4:9 los dos riñones, la grosura que está sobre ellos, y la que está sobre los ijares; y con los riñones quitará la grosura de sobre el hígado,
4:10 de la manera que se quita del buey del sacrificio de paz; y el sacerdote la hará arder sobre el altar del holocausto.
4:11 Y la piel del becerro, y toda su carne, con su cabeza, sus piernas, sus intestinos y su estiércol,
4:12 en fin, todo el becerro sacará fuera del campamento a un lugar limpio, donde se echan las cenizas, y lo quemará al fuego sobre la leña; en donde se echan las cenizas será quemado.
4:13 Si toda la congregación de Israel hubiere errado, y el yerro estuviere oculto a los ojos del pueblo, y hubieren hecho algo contra alguno de los mandamientos de Jehová en cosas que no se han de hacer, y fueren culpables;
4:14 luego que llegue a ser conocido el pecado que cometieren, la congregación ofrecerá un becerro por expiación, y lo traerán delante del tabernáculo de reunión.
4:15 Y los ancianos de la congregación pondrán sus manos sobre la cabeza del becerro delante de Jehová, y en presencia de Jehová degollarán aquel becerro.
4:16 Y el sacerdote ungido meterá de la sangre del becerro en el tabernáculo de reunión,
4:17 y mojará el sacerdote su dedo en la misma sangre, y rociará siete veces delante de Jehová hacia el velo.
4:18 Y de aquella sangre pondrá sobre los cuernos del altar que está delante de Jehová en el tabernáculo de reunión, y derramará el resto de la sangre al pie del altar del holocausto, que está a la puerta del tabernáculo de reunión.
4:19 Y le quitará toda la grosura y la hará arder sobre el altar.
4:20 Y hará de aquel becerro como hizo con el becerro de la expiación; lo mismo hará de él; así hará el sacerdote expiación por ellos, y obtendrán perdón.
4:21 Y sacará el becerro fuera del campamento, y lo quemará como quemó el primer becerro; expiación es por la congregación.
4:22 Cuando pecare un jefe, e hiciere por yerro algo contra alguno de todos los mandamientos de Jehová su Dios sobre cosas que no se han de hacer, y pecare;
4:23 luego que conociere su pecado que cometió, presentará por su ofrenda un macho cabrío sin defecto.
4:24 Y pondrá su mano sobre la cabeza del macho cabrío, y lo degollará en el lugar donde se degüella el holocausto, delante de Jehová; es expiación.
4:25 Y con su dedo el sacerdote tomará de la sangre de la expiación, y la pondrá sobre los cuernos del altar del holocausto, y derramará el resto de la sangre al pie del altar del holocausto,
4:26 y quemará toda su grosura sobre el altar, como la grosura del sacrificio de paz; así el sacerdote hará por él la expiación de su pecado, y tendrá perdón.
4:27 Si alguna persona del pueblo pecare por yerro, haciendo algo contra alguno de los mandamientos de Jehová en cosas que no se han de hacer, y delinquiere;
4:28 luego que conociere su pecado que cometió, traerá por su ofrenda una cabra, una cabra sin defecto, por su pecado que cometió.
4:29 Y pondrá su mano sobre la cabeza de la ofrenda de la expiación, y la degollará en el lugar del holocausto.
4:30 Luego con su dedo el sacerdote tomará de la sangre, y la pondrá sobre los cuernos del altar del holocausto, y derramará el resto de la sangre al pie del altar.
4:31 Y le quitará toda su grosura, de la manera que fue quitada la grosura del sacrificio de paz; y el sacerdote la hará arder sobre el altar en olor grato a Jehová; así hará el sacerdote expiación por él, y será perdonado.
4:32 Y si por su ofrenda por el pecado trajere cordero, hembra sin defecto traerá.
4:33 Y pondrá su mano sobre la cabeza de la ofrenda de expiación, y la degollará por expiación en el lugar donde se degüella el holocausto.
4:34 Después con su dedo el sacerdote tomará de la sangre de la expiación, y la pondrá sobre los cuernos del altar del holocausto, y derramará el resto de la sangre al pie del altar.
4:35 Y le quitará toda su grosura, como fue quitada la grosura del sacrificio de paz, y el sacerdote la hará arder en el altar sobre la ofrenda encendida a Jehová; y le hará el sacerdote expiación de su pecado que habrá cometido, y será perdonado.


Proverbios
Capítulo 20
20:1 El vino es escarnecedor, la sidra alborotadora, 
Y cualquiera que por ellos yerra no es sabio. 
20:2 Como rugido de cachorro de león es el terror del rey; 
El que lo enfurece peca contra sí mismo. 
20:3 Honra es del hombre dejar la contienda; 
Mas todo insensato se envolverá en ella. 
20:4 El perezoso no ara a causa del invierno; 
Pedirá, pues, en la siega, y no hallará. 
20:5 Como aguas profundas es el consejo en el corazón del hombre; 
Mas el hombre entendido lo alcanzará. 
20:6 Muchos hombres proclaman cada uno su propia bondad, 
Pero hombre de verdad, ¿quién lo hallará? 
20:7 Camina en su integridad el justo; 
Sus hijos son dichosos después de él. 
20:8 El rey que se sienta en el trono de juicio, 
Con su mirar disipa todo mal. 
20:9 ¿Quién podrá decir: Yo he limpiado mi corazón, 
Limpio estoy de mi pecado? 
20:10 Pesa falsa y medida falsa, 
Ambas cosas son abominación a Jehová. 
20:11 Aun el muchacho es conocido por sus hechos, 
Si su conducta fuere limpia y recta. 
20:12 El oído que oye, y el ojo que ve, 
Ambas cosas igualmente ha hecho Jehová. 
20:13 No ames el sueño, para que no te empobrezcas; 
Abre tus ojos, y te saciarás de pan. 
20:14 El que compra dice: Malo es, malo es; 
Mas cuando se aparta, se alaba. 
20:15 Hay oro y multitud de piedras preciosas; 
Mas los labios prudentes son joya preciosa. 
20:16 Quítale su ropa al que salió por fiador del extraño, 
Y toma prenda del que sale fiador por los extraños. 
20:17 Sabroso es al hombre el pan de mentira; 
Pero después su boca será llena de cascajo. 
20:18 Los pensamientos con el consejo se ordenan; 
Y con dirección sabia se hace la guerra. 
20:19 El que anda en chismes descubre el secreto; 
No te entremetas, pues, con el suelto de lengua. 
20:20 Al que maldice a su padre o a su madre, 
Se le apagará su lámpara en oscuridad tenebrosa. 
20:21 Los bienes que se adquieren de prisa al principio,
No serán al final bendecidos. 
20:22 No digas: Yo me vengaré; 
Espera a Jehová, y él te salvará. 
20:23 Abominación son a Jehová las pesas falsas, 
Y la balanza falsa no es buena. 
20:24 De Jehová son los pasos del hombre; 
¿Cómo, pues, entenderá el hombre su camino? 
20:25 Lazo es al hombre hacer apresuradamente voto de consagración, 
Y después de hacerlo, reflexionar. 
20:26 El rey sabio avienta a los impíos, 
Y sobre ellos hace rodar la rueda. 
20:27 Lámpara de Jehová es el espíritu del hombre, 
La cual escudriña lo más profundo del corazón. 
20:28 Misericordia y verdad guardan al rey, 
Y con clemencia se sustenta su trono. 
20:29 La gloria de los jóvenes es su fuerza, 
Y la hermosura de los ancianos es su vejez. 
20:30 Los azotes que hieren son medicina para el malo, 
Y el castigo purifica el corazón.



sábado, 13 de abril de 2013

AUDIO LECTURA PARA EL 01 DE MARZO

Mt 8.14-34,Lv 1-2,Pr 19


LECTURA PARA EL DIA 01 DE MARZO
Mateo
Capítulo 08

8:14 Vino Jesús a casa de Pedro, y vio a la suegra de éste postrada en cama, con fiebre.
8:15 Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.
8:16 Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos;
8:17 para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias.
8:18 Viéndose Jesús rodeado de mucha gente, mandó pasar al otro lado.
8:19 Y vino un escriba y le dijo: Maestro, te seguiré adondequiera que vayas.
8:20 Jesús le dijo: Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar su cabeza.
8:21 Otro de sus discípulos le dijo: Señor, permíteme que vaya primero y entierre a mi padre.
8:22 Jesús le dijo: Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos.
8:23 Y entrando él en la barca, sus discípulos le siguieron.
8:24 Y he aquí que se levantó en el mar una tempestad tan grande que las olas cubrían la barca; pero él dormía.
8:25 Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo: ¡Señor, sálvanos, que perecemos!
8:26 El les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.
8:27 Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Qué hombre es éste, que aun los vientos y el mar le obedecen?
8:28 Cuando llegó a la otra orilla, a la tierra de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino.
8:29 Y clamaron diciendo: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?
8:30 Estaba paciendo lejos de ellos un hato de muchos cerdos.
8:31 Y los demonios le rogaron diciendo: Si nos echas fuera, permítenos ir a aquel hato de cerdos.
8:32 El les dijo: Id. Y ellos salieron, y se fueron a aquel hato de cerdos; y he aquí, todo el hato de cerdos se precipitó en el mar por un despeñadero, y perecieron en las aguas.
8:33 Y los que los apacentaban huyeron, y viniendo a la ciudad, contaron todas las cosas, y lo que había pasado con los endemoniados.
8:34 Y toda la ciudad salió al encuentro de Jesús; y cuando le vieron, le rogaron que se fuera de sus contornos.



Levítico
Capítulo 01
1:1 Llamó Jehová a Moisés, y habló con él desde el tabernáculo de reunión, diciendo:
1:2 Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando alguno de entre vosotros ofrece ofrenda a Jehová, de ganado vacuno u ovejuno haréis vuestra ofrenda.
1:3 Si su ofrenda fuere holocausto vacuno, macho sin defecto lo ofrecerá; de su voluntad lo ofrecerá a la puerta del tabernáculo de reunión delante de Jehová.
1:4 Y pondrá su mano sobre la cabeza del holocausto, y será aceptado para expiación suya.
1:5 Entonces degollará el becerro en la presencia de Jehová; y los sacerdotes hijos de Aarón ofrecerán la sangre, y la rociarán alrededor sobre el altar, el cual está a la puerta del tabernáculo de reunión.
1:6 Y desollará el holocausto, y lo dividirá en sus piezas.
1:7 Y los hijos del sacerdote Aarón pondrán fuego sobre el altar, y compondrán la leña sobre el fuego.
1:8 Luego los sacerdotes hijos de Aarón acomodarán las piezas, la cabeza y la grosura de los intestinos, sobre la leña que está sobre el fuego que habrá encima del altar;
1:9 y lavará con agua los intestinos y las piernas, y el sacerdote hará arder todo sobre el altar; holocausto es, ofrenda encendida de olor grato para Jehová.
1:10 Si su ofrenda para holocausto fuere del rebaño, de las ovejas o de las cabras, macho sin defecto lo ofrecerá.
1:11 Y lo degollará al lado norte del altar delante de Jehová; y los sacerdotes hijos de Aarón rociarán su sangre sobre el altar alrededor.
1:12 Lo dividirá en sus piezas, con su cabeza y la grosura de los intestinos; y el sacerdote las acomodará sobre la leña que está sobre el fuego que habrá encima del altar;
1:13 y lavará las entrañas y las piernas con agua; y el sacerdote lo ofrecerá todo, y lo hará arder sobre el altar; holocausto es, ofrenda encendida de olor grato para Jehová.
1:14 Si la ofrenda para Jehová fuere holocausto de aves, presentará su ofrenda de tórtolas, o de palominos.
1:15 Y el sacerdote la ofrecerá sobre el altar, y le quitará la cabeza, y hará que arda en el altar; y su sangre será exprimida sobre la pared del altar.
1:16 Y le quitará el buche y las plumas, lo cual echará junto al altar, hacia el oriente, en el lugar de las cenizas.
1:17 Y la henderá por sus alas, pero no la dividirá en dos; y el sacerdote la hará arder sobre el altar, sobre la leña que estará en el fuego; holocausto es, ofrenda encendida de olor grato para Jehová.


Levítico
Capítulo 02
2:1 Cuando alguna persona ofreciere oblación a Jehová, su ofrenda será flor de harina, sobre la cual echará aceite, y pondrá sobre ella incienso,
2:2 y la traerá a los sacerdotes, hijos de Aarón; y de ello tomará el sacerdote su puño lleno de la flor de harina y del aceite, con todo el incienso, y lo hará arder sobre el altar para memorial; ofrenda encendida es, de olor grato a Jehová.
2:3 Y lo que resta de la ofrenda será de Aarón y de sus hijos; es cosa santísima de las ofrendas que se queman para Jehová.
2:4 Cuando ofrecieres ofrenda cocida en horno, será de tortas de flor de harina sin levadura amasadas con aceite, y hojaldres sin levadura untadas con aceite.
2:5 Mas si ofrecieres ofrenda de sartén, será de flor de harina sin levadura, amasada con aceite,
2:6 la cual partirás en piezas, y echarás sobre ella aceite; es ofrenda.
2:7 Si ofrecieres ofrenda cocida en cazuela, se hará de flor de harina con aceite.
2:8 Y traerás a Jehová la ofrenda que se hará de estas cosas, y la presentarás al sacerdote, el cual la llevará al altar.
2:9 Y tomará el sacerdote de aquella ofrenda lo que sea para su memorial, y lo hará arder sobre el altar; ofrenda encendida de olor grato a Jehová.
2:10 Y lo que resta de la ofrenda será de Aarón y de sus hijos; es cosa santísima de las ofrendas que se queman para Jehová.
2:11 Ninguna ofrenda que ofreciereis a Jehová será con levadura; porque de ninguna cosa leuda, ni de ninguna miel, se ha de quemar ofrenda para Jehová.
2:12 Como ofrenda de primicias las ofreceréis a Jehová; mas no subirán sobre el altar en olor grato.
2:13 Y sazonarás con sal toda ofrenda que presentes, y no harás que falte jamás de tu ofrenda la sal del pacto de tu Dios; en toda ofrenda tuya ofrecerás sal.
2:14 Si ofrecieres a Jehová ofrenda de primicias, tostarás al fuego las espigas verdes, y el grano desmenuzado ofrecerás como ofrenda de tus primicias.
2:15 Y pondrás sobre ella aceite, y pondrás sobre ella incienso; es ofrenda.
2:16 Y el sacerdote hará arder el memorial de él, parte del grano desmenuzado y del aceite, con todo el incienso; es ofrenda encendida para Jehová.


Proverbios
Capítulo 19
19:1 Mejor es el pobre que camina en integridad, 
Que el de perversos labios y fatuo. 
19:2 El alma sin ciencia no es buena, 
Y aquel que se apresura con los pies, peca. 
19:3 La insensatez del hombre tuerce su camino, 
Y luego contra Jehová se irrita su corazón. 
19:4 Las riquezas traen muchos amigos; 
Mas el pobre es apartado de su amigo. 
19:5 El testigo falso no quedará sin castigo, 
Y el que habla mentiras no escapará. 
19:6 Muchos buscan el favor del generoso, 
Y cada uno es amigo del hombre que da. 
19:7 Todos los hermanos del pobre le aborrecen; 
¡Cuánto más sus amigos se alejarán de él! 
Buscará la palabra, y no la hallará. 
19:8 El que posee entendimiento ama su alma; 
El que guarda la inteligencia hallará el bien. 
19:9 El testigo falso no quedará sin castigo, 
Y el que habla mentiras perecerá. 
19:10 No conviene al necio el deleite; 
¡Cuánto menos al siervo ser señor de los príncipes! 
19:11 La cordura del hombre detiene su furor, 
Y su honra es pasar por alto la ofensa. 
19:12 Como rugido de cachorro de león es la ira del rey, 
Y su favor como el rocío sobre la hierba. 
19:13 Dolor es para su padre el hijo necio, 
Y gotera continua las contiendas de la mujer. 
19:14 La casa y las riquezas son herencia de los padres; 
Mas de Jehová la mujer prudente. 
19:15 La pereza hace caer en profundo sueño, 
Y el alma negligente padecerá hambre. 
19:16 El que guarda el mandamiento guarda su alma; 
Mas el que menosprecia sus caminos morirá. 
19:17 A Jehová presta el que da al pobre, 
Y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar. 
19:18 Castiga a tu hijo en tanto que hay esperanza;
Mas no se apresure tu alma para destruirlo. 
19:19 El de grande ira llevará la pena; 
Y si usa de violencias, añadirá nuevos males. 
19:20 Escucha el consejo, y recibe la corrección, 
Para que seas sabio en tu vejez.
19:21 Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; 
Mas el consejo de Jehová permanecerá.
19:22 Contentamiento es a los hombres hacer misericordia; 
Pero mejor es el pobre que el mentiroso. 
19:23 El temor de Jehová es para vida, 
Y con él vivirá lleno de reposo el hombre; 
No será visitado de mal. 
19:24 El perezoso mete su mano en el plato, 
Y ni aun a su boca la llevará. 
19:25 Hiere al escarnecedor, y el simple se hará avisado; 
Y corrigiendo al entendido, entenderá ciencia. 
19:26 El que roba a su padre y ahuyenta a su madre, 
Es hijo que causa vergüenza y acarrea oprobio. 
19:27 Cesa, hijo mío, de oír las enseñanzas 
Que te hacen divagar de las razones de sabiduría. 
19:28 El testigo perverso se burlará del juicio, 
Y la boca de los impíos encubrirá la iniquidad. 
19:29 Preparados están juicios para los escarnecedores, 
Y azotes para las espaldas de los necios.