LECTURA PARA EL DIA 29 DE DICIEMBRE
Lucas
Capítulo 04
4:1 Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán, y fue
llevado por el Espíritu al desierto
4:2 por cuarenta días, y era tentado por
el diablo. Y no comió nada en aquellos días, pasados los cuales, tuvo
hambre.
4:3 Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, dí a esta
piedra que se convierta en pan.
4:4 Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda
palabra de Dios.
4:5 Y le llevó el diablo a un alto monte, y le
mostró en un momento todos los reinos de la tierra.
4:6 Y le dijo el diablo:
A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido
entregada, y a quien quiero la doy.
4:7 Si tú postrado me adorares, todos
serán tuyos.
4:8 Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de
mí, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo
servirás.
4:9 Y le llevó a Jerusalén, y le puso sobre el pináculo del
templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo;
4:10 porque
escrito está:
A sus ángeles mandará acerca de ti, que te
guarden;
4:11 y, En las manos te sostendrán, Para que no tropieces
con tu pie en piedra.
4:12 Respondiendo Jesús, le dijo: Dicho está: No tentarás al Señor tu Dios.
4:13 Y
cuando el diablo hubo acabado toda tentación, se apartó de él por un
tiempo.
4:14 Y Jesús volvió en el poder del Espíritu a Galilea, y se difundió
su fama por toda la tierra de alrededor.
4:15 Y enseñaba en las sinagogas de
ellos, y era glorificado por todos.4:16
Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la
sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer.
4:17 Y se le dio el
libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde
estaba escrito:
4:18 El Espíritu del Señor está
sobre mí,
Por cuanto me ha ungido para dar
buenas nuevas a los pobres;
Me ha enviado
a sanar a los quebrantados de corazón;
A
pregonar libertad a los cautivos,
Y vista
a los ciegos;
A poner en libertad a los
oprimidos;
4:19 A predicar el año
agradable del Señor.
4:20 Y enrollando el libro, lo dio al
ministro, y se sentó; y los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en
él.
4:21 Y comenzó a decirles: Hoy se ha cumplido esta
Escritura delante de vosotros.
4:22 Y todos daban buen testimonio de
él, y estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca, y
decían: ¿No es éste el hijo de José?
4:23 El les dijo: Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate a ti mismo; de
tantas cosas que hemos oído que se han hecho en Capernaum, haz también aquí en
tu tierra.
4:24 Y añadió: De cierto os digo, que
ningún profeta es acepto en su propia tierra.
4:25
Y en verdad os digo que muchas viudas había en Israel en los días de Elías,
cuando el cielo fue cerrado por tres años y seis meses, y hubo una gran hambre
en toda la tierra;
4:26 pero a ninguna de ellas
fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de
Sidón.
4:27 Y muchos leprosos había en Israel en
tiempo del profeta Eliseo; pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el
sirio.
4:28 Al oír estas cosas, todos en la sinagoga se llenaron de
ira;
4:29 y levantándose, le echaron fuera de la ciudad, y le llevaron hasta
la cumbre del monte sobre el cual estaba edificada la ciudad de ellos, para
despeñarle.
4:30 Mas él pasó por en medio de ellos, y se fue.
Ezequiel
Capítulo 44
44:1 Me hizo volver hacia la puerta exterior del
santuario, la cual mira hacia el oriente; y estaba cerrada.
44:2 Y me dijo
Jehová: Esta puerta estará cerrada; no se abrirá, ni entrará por ella hombre,
porque Jehová Dios de Israel entró por ella; estará, por tanto,
cerrada.
44:3 En cuanto al príncipe, por ser el príncipe, él se sentará allí
para comer pan delante de Jehová; por el vestíbulo de la puerta entrará, y por
ese mismo camino saldrá.
44:4 Y me llevó hacia la puerta del norte por
delante de la casa; y miré, y he aquí la gloria de Jehová había llenado la casa
de Jehová; y me postré sobre mi rostro.
44:5 Y me dijo Jehová: Hijo de
hombre, pon atención, y mira con tus ojos, y oye con tus oídos todo lo que yo
hablo contigo sobre todas las ordenanzas de la casa de Jehová, y todas sus
leyes; y pon atención a las entradas de la casa, y a todas las salidas del
santuario.
44:6 Y dirás a los rebeldes, a la casa de Israel: Así ha dicho
Jehová el Señor: Basta ya de todas vuestras abominaciones, oh casa de
Israel;
44:7 de traer extranjeros, incircuncisos de corazón e incircuncisos
de carne, para estar en mi santuario y para contaminar mi casa; de ofrecer mi
pan, la grosura y la sangre, y de invalidar mi pacto con todas vuestras
abominaciones.
44:8 Pues no habéis guardado lo establecido acerca de mis
cosas santas, sino que habéis puesto extranjeros como guardas de las ordenanzas
en mi santuario.
44:9 Así ha dicho Jehová el Señor: Ningún hijo de
extranjero, incircunciso de corazón e incircunciso de carne, entrará en mi
santuario, de todos los hijos de extranjeros que están entre los hijos de
Israel.
44:10 Y los levitas que se apartaron de mí cuando Israel se alejó de
mí, yéndose tras sus ídolos, llevarán su iniquidad.
44:11 Y servirán en mi
santuario como porteros a las puertas de la casa y sirvientes en la casa; ellos
matarán el holocausto y la víctima para el pueblo, y estarán ante él para
servirle.
44:12 Por cuanto les sirvieron delante de sus ídolos, y fueron a
la casa de Israel por tropezadero de maldad; por tanto, he alzado mi mano y
jurado, dice Jehová el Señor, que ellos llevarán su iniquidad.
44:13 No se
acercarán a mí para servirme como sacerdotes, ni se acercarán a ninguna de mis
cosas santas, a mis cosas santísimas, sino que llevarán su vergüenza y las
abominaciones que hicieron.
44:14 Les pondré, pues, por guardas encargados
de la custodia de la casa, para todo el servicio de ella, y para todo lo que en
ella haya de hacerse.
44:15 Mas los sacerdotes levitas hijos de Sadoc, que
guardaron el ordenamiento del santuario cuando los hijos de Israel se apartaron
de mí, ellos se acercarán para ministrar ante mí, y delante de mí estarán para
ofrecerme la grosura y la sangre, dice Jehová el Señor.
44:16 Ellos entrarán
en mi santuario, y se acercarán a mi mesa para servirme, y guardarán mis
ordenanzas.
44:17 Y cuando entren por las puertas del atrio interior, se
vestirán vestiduras de lino; no llevarán sobre ellos cosa de lana, cuando
ministren en las puertas del atrio interior y dentro de la casa.
44:18
Turbantes de lino tendrán sobre sus cabezas, y calzoncillos de lino sobre sus
lomos; no se ceñirán cosa que los haga sudar.
44:19 Cuando salgan al atrio
exterior, al atrio de afuera, al pueblo, se quitarán las vestiduras con que
ministraron, y las dejarán en las cámaras del santuario, y se vestirán de otros
vestidos, para no santificar al pueblo con sus vestiduras.
44:20 Y no se
raparán su cabeza, ni dejarán crecer su cabello, sino que lo recortarán
solamente.
44:21 Ninguno de los sacerdotes beberá vino cuando haya de entrar
en el atrio interior.
44:22 Ni viuda ni repudiada tomará por mujer, sino que
tomará virgen del linaje de la casa de Israel, o viuda que fuere viuda de
sacerdote.
44:23 Y enseñarán a mi pueblo a hacer diferencia entre lo santo y
lo profano, y les enseñarán a discernir entre lo limpio y lo no limpio.
44:24
En los casos de pleito ellos estarán para juzgar; conforme a mis juicios
juzgarán; y mis leyes y mis decretos guardarán en todas mis fiestas solemnes, y
santificarán mis días de reposo.
44:25 No se acercarán a hombre muerto para
contaminarse; pero por padre o madre, hijo o hija, hermano, o hermana que no
haya tenido marido, sí podrán contaminarse.
44:26 Y después de su
purificación, le contarán siete días.
44:27 Y el día que entre al santuario,
al atrio interior, para ministrar en el santuario, ofrecerá su expiación, dice
Jehová el Señor.
44:28 Y habrá para ellos heredad; yo seré su heredad, pero
no les daréis posesión en Israel; yo soy su posesión.
44:29 La ofrenda y la
expiación y el sacrificio por el pecado comerán, y toda cosa consagrada en
Israel será de ellos.
44:30 Y las primicias de todos los primeros frutos de
todo, y toda ofrenda de todo lo que se presente de todas vuestras ofrendas, será
de los sacerdotes; asimismo daréis al sacerdote las primicias de todas vuestras
masas, para que repose la bendición en vuestras casas.
44:31 Ninguna cosa
mortecina ni desgarrada, así de aves como de animales, comerán los
sacerdotes.
Ezequiel
Capítulo 45
45:1 Cuando repartáis por suertes la tierra en
heredad, apartaréis una porción para Jehová, que le consagraréis en la tierra,
de longitud de veinticinco mil cañas y diez mil de ancho; esto será santificado
en todo su territorio alrededor.
45:2 De esto será para el santuario
quinientas cañas de longitud y quinientas de ancho, en cuadro alrededor; y
cincuenta codos en derredor para sus ejidos.
45:3 Y de esta medida medirás
en longitud veinticinco mil cañas, y en ancho diez mil, en lo cual estará el
santuario y el lugar santísimo.
45:4 Lo consagrado de esta tierra será para
los sacerdotes, ministros del santuario, que se acercan para ministrar a Jehová;
y servirá de lugar para sus casas, y como recinto sagrado para el
santuario.
45:5 Asimismo veinticinco mil cañas de longitud y diez mil de
ancho, lo cual será para los levitas ministros de la casa, como posesión para
sí, con veinte cámaras.
45:6 Para propiedad de la ciudad señalaréis cinco
mil de anchura y veinticinco mil de longitud, delante de lo que se apartó para
el santuario; será para toda la casa de Israel.
45:7 Y la parte del príncipe
estará junto a lo que se apartó para el santuario, de uno y otro lado, y junto a
la posesión de la ciudad, delante de lo que se apartó para el santuario, y
delante de la posesión de la ciudad, desde el extremo occidental hasta el
extremo oriental, y la longitud será desde el límite occidental hasta el límite
oriental.
45:8 Esta tierra tendrá por posesión en Israel, y nunca más mis
príncipes oprimirán a mi pueblo; y darán la tierra a la casa de Israel conforme
a sus tribus.
45:9 Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Basta ya, oh príncipes de
Israel! Dejad la violencia y la rapiña. Haced juicio y justicia; quitad vuestras
imposiciones de sobre mi pueblo, dice Jehová el Señor.
45:10 Balanzas
justas, efa justo, y bato justo tendréis.
45:11 El efa y el bato serán de
una misma medida: que el bato tenga la décima parte del homer, y la décima parte
del homer el efa; la medida de ellos será según el homer.
45:12 Y el siclo
será de veinte geras. Veinte siclos, veinticinco siclos, quince siclos, os serán
una mina.
45:13 Esta será la ofrenda que ofreceréis: la sexta parte de un
efa por cada homer del trigo, y la sexta parte de un efa por cada homer de la
cebada.
45:14 La ordenanza para el aceite será que ofreceréis un bato de
aceite, que es la décima parte de un coro; diez batos harán un homer; porque
diez batos son un homer.
45:15 Y una cordera del rebaño de doscientas, de
las engordadas de Israel, para sacrificio, y para holocausto y para ofrendas de
paz, para expiación por ellos, dice Jehová el Señor.
45:16 Todo el pueblo de
la tierra estará obligado a dar esta ofrenda para el príncipe de
Israel.
45:17 Mas al príncipe corresponderá el dar el holocausto y el
sacrificio y la libación en las fiestas solemnes, en las lunas nuevas, en los
días de reposo y en todas las fiestas de la casa de Israel; él dispondrá la
expiación, la ofrenda, el holocausto y las ofrendas de paz, para hacer expiación
por la casa de Israel.
45:18 Así ha dicho Jehová el Señor: El mes primero,
el día primero del mes, tomarás de la vacada un becerro sin defecto, y
purificarás el santuario.
45:19 Y el sacerdote tomará de la sangre de la
expiación, y pondrá sobre los postes de la casa, y sobre los cuatro ángulos del
descanso del altar, y sobre los postes de las puertas del atrio
interior.
45:20 Así harás el séptimo día del mes para los que pecaron por
error y por engaño, y harás expiación por la casa.
45:21 El mes primero, a
los catorce días del mes, tendréis la pascua, fiesta de siete días; se comerá
pan sin levadura.
45:22 Aquel día el príncipe sacrificará por sí mismo y por
todo el pueblo de la tierra, un becerro por el pecado.
45:23 Y en los siete
días de la fiesta solemne ofrecerá holocausto a Jehová, siete becerros y siete
carneros sin defecto, cada día de los siete días; y por el pecado un macho
cabrío cada día.
45:24 Y con cada becerro ofrecerá ofrenda de un efa, y con
cada carnero un efa; y por cada efa un hin de aceite.
45:25 En el mes
séptimo, a los quince días del mes, en la fiesta, hará como en estos siete días
en cuanto a la expiación, en cuanto al holocausto, en cuanto al presente y en
cuanto al aceite.
Isaías
Capítulo 64
64:1 ¡Oh, si rompieses los cielos, y descendieras,
y a tu presencia se escurriesen los montes,
64:2 como fuego abrasador de
fundiciones, fuego que hace hervir las aguas, para que hicieras notorio tu
nombre a tus enemigos, y las naciones temblasen a tu presencia!
64:3 Cuando,
haciendo cosas terribles cuales nunca esperábamos, descendiste, fluyeron los
montes delante de ti.
64:4 Ni nunca oyeron, ni oídos percibieron, ni ojo ha
visto a Dios fuera de ti, que hiciese por el que en él espera.
64:5 Saliste
al encuentro del que con alegría hacía justicia, de los que se acordaban de ti
en tus caminos; he aquí, tú te enojaste porque pecamos; en los pecados hemos
perseverado por largo tiempo; ¿podremos acaso ser salvos?
64:6 Si bien todos
nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de
inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos
llevaron como viento.
64:7 Nadie hay que invoque tu nombre, que se despierte
para apoyarse en ti; por lo cual escondiste de nosotros tu rostro, y nos dejaste
marchitar en poder de nuestras maldades.
64:8 Ahora pues, Jehová, tú eres
nuestro padre; nosotros barro, y tú el que nos formaste; así que obra de tus
manos somos todos nosotros.
64:9 No te enojes sobremanera, Jehová, ni tengas
perpetua memoria de la iniquidad; he aquí, mira ahora, pueblo tuyo somos todos
nosotros.
64:10 Tus santas ciudades están desiertas, Sion es un desierto,
Jerusalén una soledad.
64:11 La casa de nuestro santuario y de nuestra
gloria, en la cual te alabaron nuestros padres, fue consumida al fuego; y todas
nuestras cosas preciosas han sido destruidas.
64:12 ¿Te estarás quieto, oh
Jehová, sobre estas cosas? ¿Callarás, y nos afligirás sobremanera?
NOTA: SI USTED DESEA RECIBIR EN SU CORREO LAS AUDIO LECTURAS REGISTRESE EN EL SIGUIENTE ENLACE http://www.ivoox.com/s_p2_44668_1.html
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