lunes, 22 de abril de 2013

Mt 12.1-21,Lv 14, Pr 26

LECTURA PARA EL DIA 08 DE MARZO

Mateo

Capítulo 12
12:1 En aquel tiempo iba Jesús por los sembrados en un día de reposo; y sus discípulos tuvieron hambre, y comenzaron a arrancar espigas y a comer.
12:2 Viéndolo los fariseos, le dijeron: He aquí tus discípulos hacen lo que no es lícito hacer en el día de reposo.
12:3 Pero él les dijo: ¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y los que con él estaban tuvieron hambre;
12:4 cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no les era lícito comer ni a él ni a los que con él estaban, sino solamente a los sacerdotes?
12:5 ¿O no habéis leído en la ley, cómo en el día de reposo los sacerdotes en el templo profanan el día de reposo, y son sin culpa?
12:6 Pues os digo que uno mayor que el templo está aquí.
12:7 Y si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes;
12:8 porque el Hijo del Hombre es Señor del día de reposo.12:9 Pasando de allí, vino a la sinagoga de ellos.
12:10 Y he aquí había allí uno que tenía seca una mano; y preguntaron a Jesús, para poder acusarle:
¿Es lícito sanar en el día de reposo?
12:11 El les dijo: ¿Qué hombre habrá de vosotros, que tenga una oveja, y si ésta cayere en un hoyo en día de reposo, no le eche mano, y la levante?
12:12 Pues ¿cuánto más vale un hombre que una oveja? Por consiguiente, es lícito hacer el bien en los días de reposo.
12:13 Entonces dijo a aquel hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y le fue restaurada sana como la otra.
12:14 Y salidos los fariseos, tuvieron consejo contra Jesús para destruirle.
12:15 Sabiendo esto Jesús, se apartó de allí; y le siguió mucha gente, y sanaba a todos,
12:16 y les encargaba rigurosamente que no le descubriesen;
12:17 para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo:
12:18 He aquí mi siervo, a quien he escogido;
Mi Amado, en quien se agrada mi alma;
Pondré mi Espíritu sobre él,
Y a los gentiles anunciará juicio.
12:19 No contenderá, ni voceará,
Ni nadie oirá en las calles su voz.
12:20 La caña cascada no quebrará,
Y el pábilo que humea no apagará,
Hasta que saque a victoria el juicio.
12:21 Y en su nombre esperarán los gentiles.


Levítico

Capítulo 14

14:1 Y habló Jehová a Moisés, diciendo:
14:2 Esta será la ley para el leproso cuando se limpiare: Será traído al sacerdote,
14:3 y éste saldrá fuera del campamento y lo examinará; y si ve que está sana la plaga de la lepra del leproso,
14:4 el sacerdote mandará luego que se tomen para el que se purifica dos avecillas vivas, limpias, y madera de cedro, grana e hisopo.
14:5 Y mandará el sacerdote matar una avecilla en un vaso de barro sobre aguas corrientes.
14:6 Después tomará la avecilla viva, el cedro, la grana y el hisopo, y los mojará con la avecilla viva en la sangre de la avecilla muerta sobre las aguas corrientes;
14:7 y rociará siete veces sobre el que se purifica de la lepra, y le declarará limpio; y soltará la avecilla viva en el campo.
14:8 Y el que se purifica lavará sus vestidos, y raerá todo su pelo, y se lavará con agua, y será limpio; y después entrará en el campamento, y morará fuera de su tienda siete días.
14:9 Y el séptimo día raerá todo el pelo de su cabeza, su barba y las cejas de sus ojos y todo su pelo, y lavará sus vestidos, y lavará su cuerpo en agua, y será limpio.
14:10 El día octavo tomará dos corderos sin defecto, y una cordera de un año sin tacha, y tres décimas de efa de flor de harina para ofrenda amasada con aceite, y un log de aceite.
14:11 Y el sacerdote que le purifica presentará delante de Jehová al que se ha de limpiar, con aquellas cosas, a la puerta del tabernáculo de reunión;
14:12 y tomará el sacerdote un cordero y lo ofrecerá por la culpa, con el log de aceite, y lo mecerá como ofrenda mecida delante de Jehová.
14:13 Y degollará el cordero en el lugar donde se degüella el sacrificio por el pecado y el holocausto, en el lugar del santuario; porque como la víctima por el pecado, así también la víctima por la culpa es del sacerdote; es cosa muy sagrada.
14:14 Y el sacerdote tomará de la sangre de la víctima por la culpa, y la pondrá el sacerdote sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho.
14:15 Asimismo el sacerdote tomará del log de aceite, y lo echará sobre la palma de su mano izquierda,
14:16 y mojará su dedo derecho en el aceite que tiene en su mano izquierda, y esparcirá del aceite con su dedo siete veces delante de Jehová.
14:17 Y de lo que quedare del aceite que tiene en su mano, pondrá el sacerdote sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho, encima de la sangre del sacrificio por la culpa.
14:18 Y lo que quedare del aceite que tiene en su mano, lo pondrá sobre la cabeza del que se purifica; y hará el sacerdote expiación por él delante de Jehová.
14:19 Ofrecerá luego el sacerdote el sacrificio por el pecado, y hará expiación por el que se ha de purificar de su inmundicia; y después degollará el holocausto,
14:20 y hará subir el sacerdote el holocausto y la ofrenda sobre el altar. Así hará el sacerdote expiación por él, y será limpio.
14:21 Mas si fuere pobre, y no tuviere para tanto, entonces tomará un cordero para ser ofrecido como ofrenda mecida por la culpa, para reconciliarse, y una décima de efa de flor de harina amasada con aceite para ofrenda, y un log de aceite,
14:22 y dos tórtolas o dos palominos, según pueda; uno será para expiación por el pecado, y el otro para holocausto.
14:23 Al octavo día de su purificación traerá estas cosas al sacerdote, a la puerta del tabernáculo de reunión, delante de Jehová.
14:24 Y el sacerdote tomará el cordero de la expiación por la culpa, y el log de aceite, y los mecerá el sacerdote como ofrenda mecida delante de Jehová.
14:25 Luego degollará el cordero de la culpa, y el sacerdote tomará de la sangre de la culpa, y la pondrá sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho.
14:26 Y el sacerdote echará del aceite sobre la palma de su mano izquierda;
14:27 y con su dedo derecho el sacerdote rociará del aceite que tiene en su mano izquierda, siete veces delante de Jehová.
14:28 También el sacerdote pondrá del aceite que tiene en su mano sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho, en el lugar de la sangre de la culpa.
14:29 Y lo que sobre del aceite que el sacerdote tiene en su mano, lo pondrá sobre la cabeza del que se purifica, para reconciliarlo delante de Jehová.
14:30 Asimismo ofrecerá una de las tórtolas o uno de los palominos, según pueda.
14:31 Uno en sacrificio de expiación por el pecado, y el otro en holocausto, además de la ofrenda; y hará el sacerdote expiación por el que se ha de purificar, delante de Jehová.
14:32 Esta es la ley para el que hubiere tenido plaga de lepra, y no tuviere más para su purificación.
14:33 Habló también Jehová a Moisés y a Aarón, diciendo:
14:34 Cuando hayáis entrado en la tierra de Canaán, la cual yo os doy en posesión, si pusiere yo plaga de lepra en alguna casa de la tierra de vuestra posesión,
14:35 vendrá aquel de quien fuere la casa y dará aviso al sacerdote, diciendo: Algo como plaga ha aparecido en mi casa.
14:36 Entonces el sacerdote mandará desocupar la casa antes que entre a mirar la plaga, para que no sea contaminado todo lo que estuviere en la casa; y después el sacerdote entrará a examinarla.
14:37 Y examinará la plaga; y si se vieren manchas en las paredes de la casa, manchas verdosas o rojizas, las cuales parecieren más profundas que la superficie de la pared,
14:38 el sacerdote saldrá de la casa a la puerta de ella, y cerrará la casa por siete días.
14:39 Y al séptimo día volverá el sacerdote, y la examinará; y si la plaga se hubiere extendido en las paredes de la casa,
14:40 entonces mandará el sacerdote, y arrancarán las piedras en que estuviere la plaga, y las echarán fuera de la ciudad en lugar inmundo.
14:41 Y hará raspar la casa por dentro alrededor, y derramarán fuera de la ciudad, en lugar inmundo, el barro que rasparen.
14:42 Y tomarán otras piedras y las pondrán en lugar de las piedras quitadas; y tomarán otro barro y recubrirán la casa.
14:43 Y si la plaga volviere a brotar en aquella casa, después que hizo arrancar las piedras y raspar la casa, y después que fue recubierta,
14:44 entonces el sacerdote entrará y la examinará; y si pareciere haberse extendido la plaga en la casa, es lepra maligna en la casa; inmunda es.
14:45 Derribará, por tanto, la tal casa, sus piedras, sus maderos y toda la mezcla de la casa; y sacarán todo fuera de la ciudad a lugar inmundo.
14:46 Y cualquiera que entrare en aquella casa durante los días en que la mandó cerrar, será inmundo hasta la noche.
14:47 Y el que durmiere en aquella casa, lavará sus vestidos; también el que comiere en la casa lavará sus vestidos.
14:48 Mas si entrare el sacerdote y la examinare, y viere que la plaga no se ha extendido en la casa después que fue recubierta, el sacerdote declarará limpia la casa, porque la plaga ha desaparecido.
14:49 Entonces tomará para limpiar la casa dos avecillas, y madera de cedro, grana e hisopo;
14:50 y degollará una avecilla en una vasija de barro sobre aguas corrientes.
14:51 Y tomará el cedro, el hisopo, la grana y la avecilla viva, y los mojará en la sangre de la avecilla muerta y en las aguas corrientes, y rociará la casa siete veces.
14:52 Y purificará la casa con la sangre de la avecilla, con las aguas corrientes, con la avecilla viva, la madera de cedro, el hisopo y la grana.
14:53 Luego soltará la avecilla viva fuera de la ciudad sobre la faz del campo. Así hará expiación por la casa, y será limpia.
14:54 Esta es la ley acerca de toda plaga de lepra y de tiña,
14:55 y de la lepra del vestido, y de la casa,
14:56 y acerca de la hinchazón, y de la erupción, y de la mancha blanca,
14:57 para enseñar cuándo es inmundo, y cuándo limpio. Esta es la ley tocante a la lepra.



Proverbios

Capítulo 26

26:1 Como no conviene la nieve en el verano, ni la lluvia en la siega,
Así no conviene al necio la honra.
26:2 Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo,
Así la maldición nunca vendrá sin causa.
26:3 El látigo para el caballo, el cabestro para el asno,
Y la vara para la espalda del necio.
26:4 Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad,
Para que no seas tú también como él.
26:5 Responde al necio como merece su necedad,
Para que no se estime sabio en su propia opinión.
26:6 Como el que se corta los pies y bebe su daño,
Así es el que envía recado por mano de un necio.
26:7 Las piernas del cojo penden inútiles;
Así es el proverbio en la boca del necio.
26:8 Como quien liga la piedra en la honda,
Así hace el que da honra al necio.
26:9 Espinas hincadas en mano del embriagado,
Tal es el proverbio en la boca de los necios.
26:10 Como arquero que a todos hiere,
Es el que toma a sueldo insensatos y vagabundos.
26:11 Como perro que vuelve a su vómito,
Así es el necio que repite su necedad.
26:12 ¿Has visto hombre sabio en su propia opinión?
Más esperanza hay del necio que de él.
26:13 Dice el perezoso: El león está en el camino;
El león está en las calles.
26:14 Como la puerta gira sobre sus quicios,
Así el perezoso se vuelve en su cama.
26:15 Mete el perezoso su mano en el plato;
Se cansa de llevarla a su boca.
26:16 En su propia opinión el perezoso es más sabio
Que siete que sepan aconsejar.
26:17 El que pasando se deja llevar de la ira en pleito ajeno
Es como el que toma al perro por las orejas.
26:18 Como el que enloquece, y echa llamas
Y saetas y muerte,
26:19 Tal es el hombre que engaña a su amigo,
Y dice: Ciertamente lo hice por broma.
26:20 Sin leña se apaga el fuego,
Y donde no hay chismoso, cesa la contienda.
26:21 El carbón para brasas, y la leña para el fuego;
Y el hombre rencilloso para encender contienda.
26:22 Las palabras del chismoso son como bocados suaves,
Y penetran hasta las entrañas.
26:23 Como escoria de plata echada sobre el tiesto
Son los labios lisonjeros y el corazón malo.
26:24 El que odia disimula con sus labios;
Mas en su interior maquina engaño.
26:25 Cuando hablare amigablemente, no le creas;
Porque siete abominaciones hay en su corazón.
26:26 Aunque su odio se cubra con disimulo,
Su maldad será descubierta en la congregación.
26:27 El que cava foso caerá en él;
Y al que revuelve la piedra, sobre él le volverá.
26:28 La lengua falsa atormenta al que ha lastimado,
Y la boca lisonjera hace resbalar.

AUDIO LECTURA PARA EL DIA 07 DE MARZO

Mt 6.20-30,Lv 13, Pr 25

LECTURA PARA EL DIA 07 DE MARZO

Mateo

Capítulo 11


11:20 Entonces comenzó a reconvenir a las ciudades en las cuales había hecho muchos de sus milagros, porque no se habían arrepentido, diciendo:
11:21 Ay de ti, Corazín! Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza.11:22 Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para Tiro y para Sidón, que para vosotras.11:23 Y tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo, hasta el Hades serás abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy.11:24 Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma, que para ti.
11:25 En aquel tiempo, respondiendo Jesús, dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y de los entendidos, y las revelaste a los niños.11:26 Sí, Padre, porque así te agradó.11:27 Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar.11:28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.11:29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas;11:30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga

Levítico

Capítulo 13

13:1 Habló Jehová a Moisés y a Aarón, diciendo:
13:2 Cuando el hombre tuviere en la piel de su cuerpo hinchazón, o erupción, o mancha blanca, y hubiere en la piel de su cuerpo como llaga de lepra, será traído a Aarón el sacerdote o a uno de sus hijos los sacerdotes.
13:3 Y el sacerdote mirará la llaga en la piel del cuerpo; si el pelo en la llaga se ha vuelto blanco, y pareciere la llaga más profunda que la piel de la carne, llaga de lepra es; y el sacerdote le reconocerá, y le declarará inmundo.
13:4 Y si en la piel de su cuerpo hubiere mancha blanca, pero que no pareciere más profunda que la piel, ni el pelo se hubiere vuelto blanco, entonces el sacerdote encerrará al llagado por siete días.
13:5 Y al séptimo día el sacerdote lo mirará; y si la llaga conserva el mismo aspecto, no habiéndose extendido en la piel, entonces el sacerdote le volverá a encerrar por otros siete días.
13:6 Y al séptimo día el sacerdote le reconocerá de nuevo; y si parece haberse oscurecido la llaga, y que no ha cundido en la piel, entonces el sacerdote lo declarará limpio: era erupción; y lavará sus vestidos, y será limpio.
13:7 Pero si se extendiere la erupción en la piel después que él se mostró al sacerdote para ser limpio, deberá mostrarse otra vez al sacerdote.
13:8 Y si reconociéndolo el sacerdote ve que la erupción se ha extendido en la piel, lo declarará inmundo: es lepra.
13:9 Cuando hubiere llaga de lepra en el hombre, será traído al sacerdote.
13:10 Y éste lo mirará, y si apareciere tumor blanco en la piel, el cual haya mudado el color del pelo, y se descubre asimismo la carne viva,
13:11 es lepra crónica en la piel de su cuerpo; y le declarará inmundo el sacerdote, y no le encerrará, porque es inmundo.
13:12 Mas si brotare la lepra cundiendo por la piel, de modo que cubriere toda la piel del llagado desde la cabeza hasta sus pies, hasta donde pueda ver el sacerdote,
13:13 entonces éste le reconocerá; y si la lepra hubiere cubierto todo su cuerpo, declarará limpio al llagado; toda ella se ha vuelto blanca, y él es limpio.
13:14 Mas el día que apareciere en él la carne viva, será inmundo.
13:15 Y el sacerdote mirará la carne viva, y lo declarará inmundo. Es inmunda la carne viva; es lepra.
13:16 Mas cuando la carne viva cambiare y se volviere blanca, entonces vendrá al sacerdote,
13:17 y el sacerdote mirará; y si la llaga se hubiere vuelto blanca, el sacerdote declarará limpio al que tenía la llaga, y será limpio.
13:18 Y cuando en la piel de la carne hubiere divieso, y se sanare,
13:19 y en el lugar del divieso hubiere una hinchazón, o una mancha blanca rojiza, será mostrado al sacerdote.
13:20 Y el sacerdote mirará; y si pareciere estar más profunda que la piel, y su pelo se hubiere vuelto blanco, el sacerdote lo declarará inmundo; es llaga de lepra que se originó en el divieso.
13:21 Y si el sacerdote la considerare, y no apareciere en ella pelo blanco, ni fuere más profunda que la piel, sino oscura, entonces el sacerdote le encerrará por siete días;
13:22 y si se fuere extendiendo por la piel, entonces el sacerdote lo declarará inmundo; es llaga.
13:23 Pero si la mancha blanca se estuviere en su lugar, y no se hubiere extendido, es la cicatriz del divieso, y el sacerdote lo declarará limpio.
13:24 Asimismo cuando hubiere en la piel del cuerpo quemadura de fuego, y hubiere en lo sanado del fuego mancha blanquecina, rojiza o blanca,
13:25 el sacerdote la mirará; y si el pelo se hubiere vuelto blanco en la mancha, y ésta pareciere ser más profunda que la piel, es lepra que salió en la quemadura; y el sacerdote lo declarará inmundo, por ser llaga de lepra.
13:26 Mas si el sacerdote la mirare, y no apareciere en la mancha pelo blanco, ni fuere más profunda que la piel, sino que estuviere oscura, le encerrará el sacerdote por siete días.
13:27 Y al séptimo día el sacerdote la reconocerá; y si se hubiere ido extendiendo por la piel, el sacerdote lo declarará inmundo; es llaga de lepra.
13:28 Pero si la mancha se estuviere en su lugar, y no se hubiere extendido en la piel, sino que estuviere oscura, es la cicatriz de la quemadura; el sacerdote lo declarará limpio, porque señal de la quemadura es.
13:29 Y al hombre o mujer que le saliere llaga en la cabeza, o en la barba,
13:30 el sacerdote mirará la llaga; y si pareciere ser más profunda que la piel, y el pelo de ella fuere amarillento y delgado, entonces el sacerdote le declarará inmundo; es tiña, es lepra de la cabeza o de la barba.
13:31 Mas cuando el sacerdote hubiere mirado la llaga de la tiña, y no pareciere ser más profunda que la piel, ni hubiere en ella pelo negro, el sacerdote encerrará por siete días al llagado de la tiña;
13:32 y al séptimo día el sacerdote mirará la llaga; y si la tiña no pareciere haberse extendido, ni hubiere en ella pelo amarillento, ni pareciere la tiña más profunda que la piel,
13:33 entonces le hará que se rasure, pero no rasurará el lugar afectado; y el sacerdote encerrará por otros siete días al que tiene la tiña.
13:34 Y al séptimo día mirará el sacerdote la tiña; y si la tiña no hubiere cundido en la piel, ni pareciere ser más profunda que la piel, el sacerdote lo declarará limpio; y lavará sus vestidos y será limpio.
13:35 Pero si la tiña se hubiere ido extendiendo en la piel después de su purificación,
13:36 entonces el sacerdote la mirará; y si la tiña hubiere cundido en la piel, no busque el sacerdote el pelo amarillento; es inmundo.
13:37 Mas si le pareciere que la tiña está detenida, y que ha salido en ella el pelo negro, la tiña está sanada; él está limpio, y limpio lo declarará el sacerdote.
13:38 Asimismo cuando el hombre o la mujer tuviere en la piel de su cuerpo manchas, manchas blancas,
13:39 el sacerdote mirará, y si en la piel de su cuerpo aparecieren manchas blancas algo oscurecidas, es empeine que brotó en la piel; está limpia la persona.
13:40 Y el hombre, cuando se le cayere el cabello, es calvo, pero limpio.
13:41 Y si hacia su frente se le cayere el cabello, es calvo por delante, pero limpio.
13:42 Mas cuando en la calva o en la antecalva hubiere llaga blanca rojiza, lepra es que brota en su calva o en su antecalva.
13:43 Entonces el sacerdote lo mirará, y si pareciere la hinchazón de la llaga blanca rojiza en su calva o en su antecalva, como el parecer de la lepra de la piel del cuerpo,
13:44 leproso es, es inmundo, y el sacerdote lo declarará luego inmundo; en su cabeza tiene la llaga.
13:45 Y el leproso en quien hubiere llaga llevará vestidos rasgados y su cabeza descubierta, y embozado pregonará: ¡Inmundo! ¡inmundo!
13:46 Todo el tiempo que la llaga estuviere en él, será inmundo; estará impuro, y habitará solo; fuera del campamento será su morada.
13:47 Cuando en un vestido hubiere plaga de lepra, ya sea vestido de lana, o de lino,
13:48 o en urdimbre o en trama de lino o de lana, o en cuero, o en cualquiera obra de cuero;
13:49 y la plaga fuere verdosa, o rojiza, en vestido o en cuero, en urdimbre o en trama, o en cualquiera obra de cuero; plaga es de lepra, y se ha de mostrar al sacerdote.
13:50 Y el sacerdote mirará la plaga, y encerrará la cosa plagada por siete días.
13:51 Y al séptimo día mirará la plaga; y si se hubiere extendido la plaga en el vestido, en la urdimbre o en la trama, en el cuero, o en cualquiera obra que se hace de cuero, lepra maligna es la plaga; inmunda será.
13:52 Será quemado el vestido, la urdimbre o trama de lana o de lino, o cualquiera obra de cuero en que hubiere tal plaga, porque lepra maligna es; al fuego será quemada.
13:53 Y si el sacerdote mirare, y no pareciere que la plaga se haya extendido en el vestido, en la urdimbre o en la trama, o en cualquiera obra de cuero,
13:54 entonces el sacerdote mandará que laven donde está la plaga, y lo encerrará otra vez por siete días.
13:55 Y el sacerdote mirará después que la plaga fuere lavada; y si pareciere que la plaga no ha cambiado de aspecto, aunque no se haya extendido la plaga, inmunda es; la quemarás al fuego; es corrosión penetrante, esté lo raído en el derecho o en el revés de aquella cosa.
13:56 Mas si el sacerdote la viere, y pareciere que la plaga se ha oscurecido después que fue lavada, la cortará del vestido, del cuero, de la urdimbre o de la trama.
13:57 Y si apareciere de nuevo en el vestido, la urdimbre o trama, o en cualquiera cosa de cuero, extendiéndose en ellos, quemarás al fuego aquello en que estuviere la plaga.
13:58 Pero el vestido, la urdimbre o la trama, o cualquiera cosa de cuero que lavares, y que se le quitare la plaga, se lavará segunda vez, y entonces será limpia.
13:59 Esta es la ley para la plaga de la lepra del vestido de lana o de lino, o de urdimbre o de trama, o de cualquiera cosa de cuero, para que sea declarada limpia o inmunda.


Proverbios

Capítulo 25

25:1 También estos son proverbios de Salomón, los cuales copiaron los varones de Ezequías, rey de Judá:
25:2 Gloria de Dios es encubrir un asunto;
Pero honra del rey es escudriñarlo.
25:3 Para la altura de los cielos, y para la profundidad de la tierra,
Y para el corazón de los reyes, no hay investigación.
25:4 Quita las escorias de la plata,
Y saldrá alhaja al fundidor.
25:5 Aparta al impío de la presencia del rey,
Y su trono se afirmará en justicia.
25:6 No te alabes delante del rey,
Ni estés en el lugar de los grandes;
25:7 Porque mejor es que se te diga: Sube acá,
Y no que seas humillado delante del príncipe
A quien han mirado tus ojos.
25:8 No entres apresuradamente en pleito,
No sea que no sepas qué hacer al fin,
Después que tu prójimo te haya avergonzado.
25:9 Trata tu causa con tu compañero,
Y no descubras el secreto a otro,
25:10 No sea que te deshonre el que lo oyere,
Y tu infamia no pueda repararse.
25:11 Manzana de oro con figuras de plata
Es la palabra dicha como conviene.
25:12 Como zarcillo de oro y joyel de oro fino
Es el que reprende al sabio que tiene oído dócil.
25:13 Como frío de nieve en tiempo de la siega,
Así es el mensajero fiel a los que lo envían,
Pues al alma de su señor da refrigerio.
25:14 Como nubes y vientos sin lluvia,
Así es el hombre que se jacta de falsa liberalidad.
25:15 Con larga paciencia se aplaca el príncipe,
Y la lengua blanda quebranta los huesos.
25:16 ¿Hallaste miel? Come lo que te basta,
No sea que hastiado de ella la vomites.
25:17 Detén tu pie de la casa de tu vecino,
No sea que hastiado de ti te aborrezca.
25:18 Martillo y cuchillo y saeta aguda
Es el hombre que habla contra su prójimo falso testimonio.
25:19 Como diente roto y pie descoyuntado
Es la confianza en el prevaricador en tiempo de angustia.
25:20 El que canta canciones al corazón afligido
Es como el que quita la ropa en tiempo de frío, o el que sobre el jabón echa vinagre.
25:21 Si el que te aborrece tuviere hambre, dale de comer pan,
Y si tuviere sed, dale de beber agua;
25:22 Porque ascuas amontonarás sobre su cabeza,
Y Jehová te lo pagará.
25:23 El viento del norte ahuyenta la lluvia,
Y el rostro airado la lengua detractora.
25:24 Mejor es estar en un rincón del terrado,
Que con mujer rencillosa en casa espaciosa.
25:25 Como el agua fría al alma sedienta,
Así son las buenas nuevas de lejanas tierras.
25:26 Como fuente turbia y manantial corrompido,
Es el justo que cae delante del impío.
25:27 Comer mucha miel no es bueno,
Ni el buscar la propia gloria es gloria.
25:28 Como ciudad derribada y sin muro
Es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.

AUDIO LECTURA PARA EL DIA 06 DE MARZO

CONTINUACION PARA EL DIA 06 DE MARZO

Mt 6.1-19,Lv 11-12,Pr 24


LECTURA PARA EL DIA 06 DE MARZO
Mateo

Capítulo 11

11:1 Cuando Jesús terminó de dar instrucciones a sus doce discípulos, se fue de allí a enseñar y a predicar en las ciudades de ellos.
11:2 Y al oír Juan, en la cárcel, los hechos de Cristo, le envió dos de sus discípulos,
11:3 para preguntarle: ¿Eres tú aquel que había de venir, o esperaremos a otro?
11:4 Respondiendo Jesús, les dijo: Id, y haced saber a Juan las cosas que oís y veis.11:5 Los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es anunciado el evangelio;11:6 y bienaventurado es el que no halle tropiezo en mí.
11:7 Mientras ellos se iban, comenzó Jesús a decir de Juan a la gente: ¿Qué salisteis a ver al desierto? ¿Una caña sacudida por el viento?11:8 ¿O qué salisteis a ver? ¿A un hombre cubierto de vestiduras delicadas? He aquí, los que llevan vestiduras delicadas, en las casas de los reyes están.11:9 Pero ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y más que profeta.11:10 Porque éste es de quien está escrito:
He aquí, yo envío mi mensajero delante de tu faz,
El cual preparará tu camino delante de ti.
11:11 De cierto os digo: Entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los cielos, mayor es que él.11:12 Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.11:13 Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan.11:14 Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir.11:15 El que tiene oídos para oír, oiga.11:16 Mas ¿a qué compararé esta generación? Es semejante a los muchachos que se sientan en las plazas, y dan voces a sus compañeros,11:17 diciendo: Os tocamos flauta, y no bailasteis; os endechamos, y no lamentasteis.11:18 Porque vino Juan, que ni comía ni bebía, y dicen: Demonio tiene.11:19 Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: He aquí un hombre comilón, y bebedor de vino, amigo de publicanos y de pecadores. Pero la sabiduría es justificada por sus hijos.

Levítico

Capítulo 11

11:1 Habló Jehová a Moisés y a Aarón, diciéndoles:
11:2 Hablad a los hijos de Israel y decidles: Estos son los animales que comeréis de entre todos los animales que hay sobre la tierra.
11:3 De entre los animales, todo el que tiene pezuña hendida y que rumia, éste comeréis.
11:4 Pero de los que rumian o que tienen pezuña, no comeréis éstos: el camello, porque rumia pero no tiene pezuña hendida, lo tendréis por inmundo.
11:5 También el conejo, porque rumia, pero no tiene pezuña, lo tendréis por inmundo.
11:6 Asimismo la liebre, porque rumia, pero no tiene pezuña, la tendréis por inmunda.
11:7 También el cerdo, porque tiene pezuñas, y es de pezuñas hendidas, pero no rumia, lo tendréis por inmundo.
11:8 De la carne de ellos no comeréis, ni tocaréis su cuerpo muerto; los tendréis por inmundos.
11:9 Esto comeréis de todos los animales que viven en las aguas: todos los que tienen aletas y escamas en las aguas del mar, y en los ríos, estos comeréis.
11:10 Pero todos los que no tienen aletas ni escamas en el mar y en los ríos, así de todo lo que se mueve como de toda cosa viviente que está en las aguas, los tendréis en abominación.
11:11 Os serán, pues, abominación; de su carne no comeréis, y abominaréis sus cuerpos muertos.
11:12 Todo lo que no tuviere aletas y escamas en las aguas, lo tendréis en abominación.
11:13 Y de las aves, éstas tendréis en abominación; no se comerán, serán abominación: el águila, el quebrantahuesos, el azor,
11:14 el gallinazo, el milano según su especie;
11:15 todo cuervo según su especie;
11:16 el avestruz, la lechuza, la gaviota, el gavilán según su especie;
11:17 el buho, el somormujo, el ibis,
11:18 el calamón, el pelícano, el buitre,
11:19 la cigüeña, la garza según su especie, la abubilla y el murciélago.
11:20 Todo insecto alado que anduviere sobre cuatro patas, tendréis en abominación.
11:21 Pero esto comeréis de todo insecto alado que anda sobre cuatro patas, que tuviere piernas además de sus patas para saltar con ellas sobre la tierra;
11:22 estos comeréis de ellos: la langosta según su especie, el langostín según su especie, el argol según su especie, y el hagab según su especie.
11:23 Todo insecto alado que tenga cuatro patas, tendréis en abominación.
11:24 Y por estas cosas seréis inmundos; cualquiera que tocare sus cuerpos muertos será inmundo hasta la noche,
11:25 y cualquiera que llevare algo de sus cadáveres lavará sus vestidos, y será inmundo hasta la noche.
11:26 Todo animal de pezuña, pero que no tiene pezuña hendida, ni rumia, tendréis por inmundo; y cualquiera que los tocare será inmundo.
11:27 Y de todos los animales que andan en cuatro patas, tendréis por inmundo a cualquiera que ande sobre sus garras; y todo el que tocare sus cadáveres será inmundo hasta la noche.
11:28 Y el que llevare sus cadáveres, lavará sus vestidos, y será inmundo hasta la noche; los tendréis por inmundos.
11:29 Y tendréis por inmundos a estos animales que se mueven sobre la tierra: la comadreja, el ratón, la rana según su especie,
11:30 el erizo, el cocodrilo, el lagarto, la lagartija y el camaleón.
11:31 Estos tendréis por inmundos de entre los animales que se mueven, y cualquiera que los tocare cuando estuvieren muertos será inmundo hasta la noche.
11:32 Y todo aquello sobre que cayere algo de ellos después de muertos, será inmundo; sea cosa de madera, vestido, piel, saco, sea cualquier instrumento con que se trabaja, será metido en agua, y quedará inmundo hasta la noche; entonces quedará limpio.
11:33 Toda vasija de barro dentro de la cual cayere alguno de ellos será inmunda, así como todo lo que estuviere en ella, y quebraréis la vasija.
11:34 Todo alimento que se come, sobre el cual cayere el agua de tales vasijas, será inmundo; y toda bebida que hubiere en esas vasijas será inmunda.
11:35 Todo aquello sobre que cayere algo del cadáver de ellos será inmundo; el horno u hornillos se derribarán; son inmundos, y por inmundos los tendréis.
11:36 Con todo, la fuente y la cisterna donde se recogen aguas serán limpias; mas lo que hubiere tocado en los cadáveres será inmundo.
11:37 Y si cayere algo de los cadáveres sobre alguna semilla que se haya de sembrar, será limpia.
11:38 Mas si se hubiere puesto agua en la semilla, y cayere algo de los cadáveres sobre ella, la tendréis por inmunda.
11:39 Y si algún animal que tuviereis para comer muriere, el que tocare su cadáver será inmundo hasta la noche.
11:40 Y el que comiere del cuerpo muerto, lavará sus vestidos y será inmundo hasta la noche; asimismo el que sacare el cuerpo muerto, lavará sus vestidos y será inmundo hasta la noche.
11:41 Y todo reptil que se arrastra sobre la tierra es abominación; no se comerá.
11:42 Todo lo que anda sobre el pecho, y todo lo que anda sobre cuatro o más patas, de todo animal que se arrastra sobre la tierra, no lo comeréis, porque es abominación.
11:43 No hagáis abominables vuestras personas con ningún animal que se arrastra, ni os contaminéis con ellos, ni seáis inmundos por ellos.
11:44 Porque yo soy Jehová vuestro Dios; vosotros por tanto os santificaréis, y seréis santos, porque yo soy santo; así que no contaminéis vuestras personas con ningún animal que se arrastre sobre la tierra.
11:45 Porque yo soy Jehová, que os hago subir de la tierra de Egipto para ser vuestro Dios: seréis, pues, santos, porque yo soy santo.
11:46 Esta es la ley acerca de las bestias, y las aves, y todo ser viviente que se mueve en las aguas, y todo animal que se arrastra sobre la tierra,
11:47 para hacer diferencia entre lo inmundo y lo limpio, y entre los animales que se pueden comer y los animales que no se pueden comer.


Levítico

Capítulo 12

12:1 Habló Jehová a Moisés, diciendo:
12:2 Habla a los hijos de Israel y diles: La mujer cuando conciba y dé a luz varón, será inmunda siete días; conforme a los días de su menstruación será inmunda.
12:3 Y al octavo día se circuncidará al niño.
12:4 Mas ella permanecerá treinta y tres días purificándose de su sangre; ninguna cosa santa tocará, ni vendrá al santuario, hasta cuando sean cumplidos los días de su purificación.
12:5 Y si diere a luz hija, será inmunda dos semanas, conforme a su separación, y sesenta y seis días estará purificándose de su sangre.
12:6 Cuando los días de su purificación fueren cumplidos, por hijo o por hija, traerá un cordero de un año para holocausto, y un palomino o una tórtola para expiación, a la puerta del tabernáculo de reunión, al sacerdote;
12:7 y él los ofrecerá delante de Jehová, y hará expiación por ella, y será limpia del flujo de su sangre. Esta es la ley para la que diere a luz hijo o hija.
12:8 Y si no tiene lo suficiente para un cordero, tomará entonces dos tórtolas o dos palominos, uno para holocausto y otro para expiación; y el sacerdote hará expiación por ella, y será limpia.


Proverbios

Capítulo 24

24:1 No tengas envidia de los hombres malos,
Ni desees estar con ellos;
24:2 Porque su corazón piensa en robar,
E iniquidad hablan sus labios.
24:3 Con sabiduría se edificará la casa,
Y con prudencia se afirmará;
24:4 Y con ciencia se llenarán las cámaras
De todo bien preciado y agradable.
24:5 El hombre sabio es fuerte,
Y de pujante vigor el hombre docto.
24:6 Porque con ingenio harás la guerra,
Y en la multitud de consejeros está la victoria.
24:7 Alta está para el insensato la sabiduría;
En la puerta no abrirá él su boca.
24:8 Al que piensa hacer el mal,
Le llamarán hombre de malos pensamientos.
24:9 El pensamiento del necio es pecado,
Y abominación a los hombres el escarnecedor.
24:10 Si fueres flojo en el día de trabajo,
Tu fuerza será reducida.
24:11 Libra a los que son llevados a la muerte;
Salva a los que están en peligro de muerte.
24:12 Porque si dijeres: Ciertamente no lo supimos,
¿Acaso no lo entenderá el que pesa los corazones?
El que mira por tu alma, él lo conocerá,
Y dará al hombre según sus obras.
24:13 Come, hijo mío, de la miel, porque es buena,
Y el panal es dulce a tu paladar.
24:14 Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría;
Si la hallares tendrás recompensa,
Y al fin tu esperanza no será cortada.
24:15 Oh impío, no aceches la tienda del justo,
No saquees su cámara;
24:16 Porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse;
Mas los impíos caerán en el mal.
24:17 Cuando cayere tu enemigo, no te regocijes,
Y cuando tropezare, no se alegre tu corazón;
24:18 No sea que Jehová lo mire, y le desagrade,
Y aparte de sobre él su enojo.
24:19 No te entremetas con los malignos,
Ni tengas envidia de los impíos;
24:20 Porque para el malo no habrá buen fin,
Y la lámpara de los impíos será apagada.
24:21 Teme a Jehová, hijo mío, y al rey;
No te entremetas con los veleidosos;
24:22 Porque su quebrantamiento vendrá de repente;
Y el quebrantamiento de ambos,
¿quién lo comprende?
24:23 También estos son dichos de los sabios:
Hacer acepción de personas en el juicio no es bueno.
24:24 El que dijere al malo: Justo eres,
Los pueblos lo maldecirán, y le detestarán las naciones;
24:25 Mas los que lo reprendieren tendrán felicidad,
Y sobre ellos vendrá gran bendición.
24:26 Besados serán los labios
Del que responde palabras rectas.
24:27 Prepara tus labores fuera,
Y disponlas en tus campos,
Y después edificarás tu casa.
24:28 No seas sin causa testigo contra tu prójimo,
Y no lisonjees con tus labios.
24:29 No digas: Como me hizo, así le haré;
Daré el pago al hombre según su obra.
24:30 Pasé junto al campo del hombre perezoso,
Y junto a la viña del hombre falto de entendimiento;
24:31 Y he aquí que por toda ella habían crecido los espinos,
Ortigas habían ya cubierto su faz,
Y su cerca de piedra estaba ya destruida.
24:32 Miré, y lo puse en mi corazón;
Lo vi, y tomé consejo.
24:33 Un poco de sueño, cabeceando otro poco,
Poniendo mano sobre mano otro poco para dormir;
24:34 Así vendrá como caminante tu necesidad,
Y tu pobreza como hombre armado.

Sintamos miedo a la muerte:

Lo que la Palabra de Dios nos dice cuando... Sintamos miedo a la muerte: - Juan 11 - 1a Corintios 15:35-58 - 2ª Corintios 5:1-10 - ...