miércoles, 9 de octubre de 2024

💥EL TEMA DE HOY: EXORTACION A LA OBEDIENCIA 💥

Proverbios

Capítulo 03

3:1 Hijo mío, no te olvides de mi ley, 
Y tu corazón guarde mis mandamientos; 
3:2 Porque largura de días y años de vida 
Y paz te aumentarán. 
3:3 Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; 
Atalas a tu cuello, 
Escríbelas en la tabla de tu corazón; 
3:4 Y hallarás gracia y buena opinión 
Ante los ojos de Dios y de los hombres.
3:5 Fíate de Jehová de todo tu corazón, 
Y no te apoyes en tu propia prudencia. 
3:6 Reconócelo en todos tus caminos, 
Y él enderezará tus veredas. 
3:7 No seas sabio en tu propia opinión;
Teme a Jehová, y apártate del mal; 
3:8 Porque será medicina a tu cuerpo, 
Y refrigerio para tus huesos. 
3:9 Honra a Jehová con tus bienes,
Y con las primicias de todos tus frutos; 
3:10 Y serán llenos tus graneros con abundancia, 
Y tus lagares rebosarán de mosto. 
3:11 No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, 
Ni te fatigues de su corrección;
3:12 Porque Jehová al que ama castiga,
Como el padre al hijo a quien quiere.
3:13 Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, 
Y que obtiene la inteligencia; 
3:14 Porque su ganancia es mejor que la ganancia de la plata, 
Y sus frutos más que el oro fino. 
3:15 Más preciosa es que las piedras preciosas; 
Y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella. 
3:16 Largura de días está en su mano derecha; 
En su izquierda, riquezas y honra. 
3:17 Sus caminos son caminos deleitosos, 
Y todas sus veredas paz. 
3:18 Ella es árbol de vida a los que de ella echan mano, 
Y bienaventurados son los que la retienen. 
3:19 Jehová con sabiduría fundó la tierra; 
Afirmó los cielos con inteligencia. 
3:20 Con su ciencia los abismos fueron divididos, 
Y destilan rocío los cielos. 
3:21 Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; 
Guarda la ley y el consejo, 
3:22 Y serán vida a tu alma, 
Y gracia a tu cuello. 
3:23 Entonces andarás por tu camino confiadamente, 
Y tu pie no tropezará. 
3:24 Cuando te acuestes, no tendrás temor, 
Sino que te acostarás, y tu sueño será grato. 
3:25 No tendrás temor de pavor repentino, 
Ni de la ruina de los impíos cuando viniere, 
3:26 Porque Jehová será tu confianza, 
Y él preservará tu pie de quedar preso. 
3:27 No te niegues a hacer el bien a quien es debido, 
Cuando tuvieres poder para hacerlo. 
3:28 No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, 
Y mañana te daré, 
Cuando tienes contigo qué darle. 
3:29 No intentes mal contra tu prójimo 
Que habita confiado junto a ti. 
3:30 No tengas pleito con nadie sin razón, 
Si no te han hecho agravio. 
3:31 No envidies al hombre injusto, 
Ni escojas ninguno de sus caminos. 
3:32 Porque Jehová abomina al perverso; 
Mas su comunión íntima es con los justos. 
3:33 La maldición de Jehová está en la casa del impío, 
Pero bendecirá la morada de los justos. 
3:34 Ciertamente él escarnecerá a los escarnecedores, 
Y a los humildes dará gracia.
3:35 Los sabios heredarán honra, 
Mas los necios llevarán ignominia.


💥EL MENSAJE QUE NOS DA 💥


El pasaje de Proverbios 3 ofrece una serie de enseñanzas prácticas y espirituales para nuestra vida cotidiana, centradas en la importancia de confiar en Dios, vivir con sabiduría, y seguir Sus mandamientos. Algunos mensajes clave que podemos aplicar son:

  1. La obediencia y confianza en Dios traen bendición (vv. 1-6): Se nos exhorta a no olvidar la ley de Dios, guardarla en el corazón, y confiar plenamente en Él. Al hacerlo, experimentamos paz, largura de días, y dirección en nuestros caminos. Esto nos enseña que una vida guiada por la obediencia a Dios trae estabilidad y bienestar.

  2. Humildad y reverencia a Dios (vv. 7-8): Nos aconseja no ser sabios en nuestra propia opinión, sino temer al Señor y apartarnos del mal. Esto nos recuerda la necesidad de ser humildes y de reconocer que nuestra sabiduría es limitada, mientras que Dios es la fuente de toda sabiduría verdadera.

  3. La generosidad y la honradez producen prosperidad (vv. 9-10): Se nos anima a honrar a Dios con nuestras riquezas y ser generosos con los bienes que hemos recibido. La promesa es que nuestros "graneros serán llenos". Este principio de generosidad refleja la gratitud y la confianza en que Dios proveerá abundantemente cuando damos con el corazón.

  4. El valor de la sabiduría (vv. 13-18): La sabiduría es presentada como algo más valioso que el oro o las piedras preciosas. Nos enseña que perseguir la sabiduría es más beneficioso que buscar riquezas materiales, ya que trae paz, prosperidad y una vida bienaventurada.

  5. Dios disciplina con amor (vv. 11-12): Aunque la corrección de Dios puede ser difícil, se nos recuerda que es una muestra de Su amor, al igual que un padre disciplina a su hijo para su bien. Esto nos ayuda a ver las dificultades como oportunidades para crecer bajo el cuidado de Dios.

  6. El bienestar integral al seguir a Dios (vv. 21-26): Mantener la ley y el consejo de Dios en nuestra vida resulta en paz, seguridad, y ausencia de temor. Andar confiadamente y descansar sin miedo refleja una vida fundamentada en la confianza en Dios.

  7. El trato justo y bondadoso hacia los demás (vv. 27-31): El pasaje nos llama a hacer el bien a los demás y a actuar con justicia y bondad, evitando la maldad y los pleitos innecesarios. Este principio refuerza el valor de la ética y la responsabilidad social en nuestras relaciones diarias.

  8. La diferencia entre los justos y los impíos (vv. 32-35): Dios tiene comunión íntima con los justos, mientras que los perversos son abominados. La sabiduría trae honor, mientras que la necedad lleva a la vergüenza. Nos enseña que vivir rectamente bajo la guía de Dios resulta en bendición y honra, mientras que la injusticia y la maldad traen maldición.

Este capítulo de Proverbios es un llamado a una vida íntegra, centrada en la confianza en Dios, el amor al prójimo, y la búsqueda de la sabiduría divina como el camino hacia una vida plena y satisfactoria.

💥OREMOS 💥


Bendito Dios y Padre, Señor Jesús, una vez más estamos delante del trono de tu presencia, dándote gracias en esta hermosa mañana por este nuevo día miércoles. Te damos gracias porque, si estamos aquí, es porque a ti te place, Padre.

Hoy, en tu palabra de Proverbios capítulo 3, nos invitas, oh Dios, a tener obediencia y confianza en ti para que seamos bendecidos. Padre, gracias por exhortarnos a no olvidarnos de tu ley. Gracias por pedirnos que confiemos plenamente en ti, Señor mi Dios. Gracias porque, cuando lo hemos hecho, hemos experimentado gozo, paz, alegría y una satisfacción plena.

Padre, ayúdanos, oh Dios, a ser humildes y reverentes contigo. Ayúdanos a no olvidarnos de la necesidad de ser humildes y reconocer que necesitamos de ti, Padre eterno y amado. Que la generosidad y la honradez produzcan en nosotros esa prosperidad que necesitamos, Señor mi Dios. Que seamos llenos, Padre, y que también compartamos lo que recibimos con los que lo necesitan.

Oh Señor mi Dios, ayúdanos a no pasar por alto el valor de la sabiduría, porque es algo valioso para nuestras vidas, y nos enseña a seguir caminando en caminos de amor, justicia y verdad.

Gracias, mi Dios, porque tú nos disciplinas con amor. Padre, sabemos que lo haces porque nos amas, porque nos quieres, y porque somos tus hijos. Padre bendito, seas exaltado.

Ayúdanos, Señor mi Dios, a mantenernos en tu ley y en tu consejo, y a estar siempre con esa paz, seguridad y ausencia de miedo y temor. Gracias te damos, oh Dios. Bendito seas, porque tú eres justo y bondadoso con todos. Padre, tus caminos no son nuestros caminos, ni tus pensamientos nuestros pensamientos.

Señor mi Dios, gracias porque tienes una paga para cada uno de nosotros; ya seamos justos o impíos, tú nos pagarás conforme a nuestras obras. Oh Dios, ayúdanos a vivir correctamente bajo tu guía y tu voluntad. Que nunca se termine el amor y la sabiduría que tú derramas sobre nosotros.

Bendícenos, Señor mi Dios. Bendice a tu pueblo de Israel, a los gobernantes, a los que están enfermos en los hospitales, a los que están presos en las cárceles. Ayúdalos, Padre, alcánzalos con el poder de tu palabra.

Te pedimos, mi Dios, que sigas bendiciéndonos y perdonando nuestras rebeliones, nuestras iniquidades y nuestras concupiscencias. Que este día sea un día lleno de amor, paz, gracia y misericordia.

En el nombre de Cristo Jesús, amén.