jueves, 11 de octubre de 2012

Ap 11,Est 1,Saln 105.1-25

LECTURA PARA EL DIA 11 DE OCTUBRE
Apocalipsis Capítulo 11
11:1 Entonces me fue dada una caña semejante a una vara de medir, y se me dijo: Levántate, y mide el templo de Dios, y el altar, y a los que adoran en él.
11:2 Pero el patio que está fuera del templo déjalo aparte, y no lo midas, porque ha sido entregado a los gentiles; y ellos hollarán la ciudad santa cuarenta y dos meses.
11:3 Y daré a mis dos testigos que profeticen por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio.
11:4 Estos testigos son los dos olivos, y los dos candeleros que están en pie delante del Dios de la tierra.
11:5 Si alguno quiere dañarlos, sale fuego de la boca de ellos, y devora a sus enemigos; y si alguno quiere hacerles daño, debe morir él de la misma manera.
11:6 Estos tienen poder para cerrar el cielo, a fin de que no llueva en los días de su profecía; y tienen poder sobre las aguas para convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda plaga, cuantas veces quieran.
11:7 Cuando hayan acabado su testimonio, la bestia que sube del abismo hará guerra contra ellos, y los vencerá y los matará.
11:8 Y sus cadáveres estarán en la plaza de la grande ciudad que en sentido espiritual se llama Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue crucificado.
11:9 Y los de los pueblos, tribus, lenguas y naciones verán sus cadáveres por tres días y medio, y no permitirán que sean sepultados.
11:10 Y los moradores de la tierra se regocijarán sobre ellos y se alegrarán, y se enviarán regalos unos a otros; porque estos dos profetas habían atormentado a los moradores de la tierra.
11:11 Pero después de tres días y medio entró en ellos el espíritu de vida enviado por Dios, y se levantaron sobre sus pies, y cayó gran temor sobre los que los vieron.
11:12 Y oyeron una gran voz del cielo, que les decía: Subid acá. Y subieron al cielo en una nube; y sus enemigos los vieron.
11:13 En aquella hora hubo un gran terremoto, y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y por el terremoto murieron en número de siete mil hombres; y los demás se aterrorizaron, y dieron gloria al Dios del cielo.
11:14 El segundo ay pasó; he aquí, el tercer ay viene pronto.
11:15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.
11:16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios,
11:17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado.
11:18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra.
11:19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.


Ester Capítulo 01

1:1 Aconteció en los días de Asuero, el Asuero que reinó desde la India hasta Etiopía sobre ciento veintisiete provincias,
1:2 que en aquellos días, cuando fue afirmado el rey Asuero sobre el trono de su reino, el cual estaba en Susa capital del reino,
1:3 en el tercer año de su reinado hizo banquete a todos sus príncipes y cortesanos, teniendo delante de él a los más poderosos de Persia y de Media, gobernadores y príncipes de provincias,
1:4 para mostrar él las riquezas de la gloria de su reino, el brillo y la magnificencia de su poder, por muchos días, ciento ochenta días.
1:5 Y cumplidos estos días, hizo el rey otro banquete por siete días en el patio del huerto del palacio real a todo el pueblo que había en Susa capital del reino, desde el mayor hasta el menor.
1:6 El pabellón era de blanco, verde y azul, tendido sobre cuerdas de lino y púrpura en anillos de plata y columnas de mármol; los reclinatorios de oro y de plata, sobre losado de pórfido y de mármol, y de alabastro y de jacinto.
1:7 Y daban a beber en vasos de oro, y vasos diferentes unos de otros, y mucho vino real, de acuerdo con la generosidad del rey.
1:8 Y la bebida era según esta ley: Que nadie fuese obligado a beber; porque así lo había mandado el rey a todos los mayordomos de su casa, que se hiciese según la voluntad de cada uno.
1:9 Asimismo la reina Vasti hizo banquete para las mujeres, en la casa real del rey Asuero.
1:10 El séptimo día, estando el corazón del rey alegre del vino, mandó a Mehumán, Bizta, Harbona, Bigta, Abagta, Zetar y Carcas, siete eunucos que servían delante del rey Asuero,
1:11 que trajesen a la reina Vasti a la presencia del rey con la corona regia, para mostrar a los pueblos y a los príncipes su belleza; porque era hermosa.
1:12 Mas la reina Vasti no quiso comparecer a la orden del rey enviada por medio de los eunucos; y el rey se enojó mucho, y se encendió en ira.
1:13 Preguntó entonces el rey a los sabios que conocían los tiempos (porque así acostumbraba el rey con todos los que sabían la ley y el derecho;
1:14 y estaban junto a él Carsena, Setar, Admata, Tarsis, Meres, Marsena y Memucán, siete príncipes de Persia y de Media que veían la cara del rey, y se sentaban los primeros del reino);
1:15 les preguntó qué se había de hacer con la reina Vasti según la ley, por cuanto no había cumplido la orden del rey Asuero enviada por medio de los eunucos.
1:16 Y dijo Memucán delante del rey y de los príncipes: No solamente contra el rey ha pecado la reina Vasti, sino contra todos los príncipes, y contra todos los pueblos que hay en todas las provincias del rey Asuero.
1:17 Porque este hecho de la reina llegará a oídos de todas las mujeres, y ellas tendrán en poca estima a sus maridos, diciendo: El rey Asuero mandó traer delante de sí a la reina Vasti, y ella no vino.
1:18 Y entonces dirán esto las señoras de Persia y de Media que oigan el hecho de la reina, a todos los príncipes del rey; y habrá mucho menosprecio y enojo.
1:19 Si parece bien al rey, salga un decreto real de vuestra majestad y se escriba entre las leyes de Persia y de Media, para que no sea quebrantado: Que Vasti no venga más delante del rey Asuero; y el rey haga reina a otra que sea mejor que ella.
1:20 Y el decreto que dicte el rey será oído en todo su reino, aunque es grande, y todas las mujeres darán honra a sus maridos, desde el mayor hasta el menor.
1:21 Agradó esta palabra a los ojos del rey y de los príncipes, e hizo el rey conforme al dicho de Memucán;
1:22 pues envió cartas a todas las provincias del rey, a cada provincia conforme a su escritura, y a cada pueblo conforme a su lenguaje, diciendo que todo hombre afirmase su autoridad en su casa; y que se publicase esto en la lengua de su pueblo.


 Salmos Capítulo 105

105:1 Alabad a Jehová, invocad su nombre;
Dad a conocer sus obras en los pueblos.
105:2 Cantadle, cantadle salmos;
Hablad de todas sus maravillas.
105:3 Gloriaos en su santo nombre;
Alégrese el corazón de los que buscan a Jehová.
105:4 Buscad a Jehová y su poder;
Buscad siempre su rostro.
105:5 Acordaos de las maravillas que él ha hecho,
De sus prodigios y de los juicios de su boca,
105:6 Oh vosotros, descendencia de Abraham su siervo,
Hijos de Jacob, sus escogidos.
105:7 El es Jehová nuestro Dios;
En toda la tierra están sus juicios.
105:8 Se acordó para siempre de su pacto;
De la palabra que mandó para mil generaciones,
105:9 La cual concertó con Abraham,
Y de su juramento a Isaac.
105:10 La estableció a Jacob por decreto,
A Israel por pacto sempiterno,
105:11 Diciendo: A ti te daré la tierra de Canaán
Como porción de vuestra heredad.
105:12 Cuando ellos eran pocos en número,
Y forasteros en ella,
105:13 Y andaban de nación en nación,
De un reino a otro pueblo,
105:14 No consintió que nadie los agraviase,
Y por causa de ellos castigó a los reyes.
105:15 No toquéis, dijo, a mis ungidos,
Ni hagáis mal a mis profetas.
105:16 Trajo hambre sobre la tierra,
Y quebrantó todo sustento de pan.
105:17 Envió un varón delante de ellos;
A José, que fue vendido por siervo.
105:18 Afligieron sus pies con grillos;
En cárcel fue puesta su persona.
105:19 Hasta la hora que se cumplió su palabra,
El dicho de Jehová le probó.
105:20 Envió el rey, y le soltó;
El señor de los pueblos, y le dejó ir libre.
105:21 Lo puso por señor de su casa,
Y por gobernador de todas sus posesiones,
105:22 Para que reprimiera a sus grandes como él quisiese,
Y a sus ancianos enseñara sabiduría.
105:23 Después entró Israel en Egipto,
Y Jacob moró en la tierra de Cam.
105:24 Y multiplicó su pueblo en gran manera,
Y lo hizo más fuerte que sus enemigos.
105:25 Cambió el corazón de ellos para que aborreciesen a su pueblo,
Para que contra sus siervos pensasen mal.

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